El tiempo en: Jaén

Jerez

El Ayuntamiento apuesta por reducir la presencia del coche en el Jerez intramuros

Aspira a obtener fondos europeos para declarar al casco histórico como zona ‘de bajas emisiones’

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
  • Mamen Sánchez, en la presentación del proyecto. -

El Ayuntamiento de Jerez pretende que los fondos Next Generation le permita declarar al casco histórico como ‘zona de bajas emisiones’, lo que implicaría una notable reducción de la presencia del vehículo particular.

El proyecto con el que se concurre a estos fondos tiene un presupuesto total de 4,5 millones de euros, de los 1,5 tendrían que ser aportados por el propio Ayuntamiento.

Esa subvención permitiría acometer una serie de actuaciones encaminadas a la consecución de ese objetivo, en el que ya se está trabajando en cualquier caso a través de iniciativas tales como la reurbanización del entorno de San Juan de los Caballeros o Juana de Dios Lacoste –con plataforma única y preferencia para peatones y vehículos de residentes- o la plaza Salvador Allende.

A ese concepto de plataforma única se pretende sumar todo el espacio comprendido entre las plazas Rafael Rivero y San Juan, que incluye calles como San Marcos, Padre Rego, plaza de la Compañía o Francos.

A las actuaciones meramente urbanísticas se incorporan en este proyecto otras de las que se ha venido hablando en estos últimos años pero que podrían materializarse en realidad gracias a estos fondos europeos.

Así, se contempla una inversión de alrededor de un millón de euros en dotar a la Jefatura de la Policía Local de una sala de control de tráfico con todos los adelantos técnicos posibles, que incluirían controles de acceso e identificación de las matrículas de los vehículos que pretendieran acceder a esa ‘zona de bajas emisiones’.

Incluso se contemplan cámaras para el control de la carga y descarga que permitirían limitar el tiempo de estancia en los espacios habilitados para este fin.

El proyecto incluye mejoras para el transporte público, centradas fundamentalmente en las cocheras, que estarían preparadas para la carga de autobuses eléctricos y dispondrían de la tecnología necesaria para controlar la situación de cada vehículo y comprobar que se cumplen los horarios de paso por cada parada. El objetivo es que el transporte público “sea mucho más fiable” y por tanto atractivo para sus potenciales usuarios.

Las medidas encaminadas a garantizar esa ‘zona de bajas emisiones’ en el centro histórico irían más allá de ese espacio concreto de la ciudad, ya que se parte de la base de que es necesario mejorar tanto los pasos peatonales como la seguridad del tráfico en general. A este respecto, se contemplan señalizaciones con led de pasos de cebra y rotondas, por citar algunos ejemplos.

La alcaldesa, Mamen Sánchez, aclaró que “no se trata de blindar la zona centro, sino de dotarla de una protección frente al impacto de los flujos de vehículos”, priorizando los desplazamientos “mediante fórmulas más sostenibles”. “Es un proceso que pone en el centro de la movilidad urbana al peatón, que tiene en cuenta a los residentes del centro y las necesidades de quienes acceden a esta zona por motivos profesionales o comerciales”.

Este proyecto de movilidad sostenible y digital ha sido ya remitido al Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana en la primera convocatoria del programa de ayudas de los fondos Next Generation destinados a los municipios para descarbonizar las ciudades y fomentar una movilidad más sostenible.

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN