El impacto de la variante ómicron ha provocado una explosión de contagios y Sevilla no se ha quedado al margen, sin embargo los datos comparativos con las cinco olas anteriores evidencian el descenso brusco en hospitalizaciones e ingresos UCI, además de en víctimas.
En lo que llevamos de sexta ola, desde el 1 de octubre, se contabilizan en la provincia 29.866 positivos, de los que sólo el 1,65% ha requerido hospitalización y el 0,12% ha ingresado en UCI, y los decesos suponen el 0,13% de los infectados, lo que evidencia la menor agresividad de este periodo, gracias fundamentalmente a que más del 80% de la población tiene la pauta completa de vacunación, con los mayores con la tercera de refuerzo, a pesar que ya casi se han alcanzado el 70% de los casos que se dieron en la ola más virulenta, la tercera.
Así, en la primera ola, quizás con la que menos se puede comparar por la situación nueva en la que nos encontramos, Sevilla contabilizó 2.979 casos de los que el 40% requirió hospitalización y el 5,1% ingreso en UCI, con una mortalidad del 9,7% de los infectados. La segunda, con 56.454 casos y más larga en el tiempo (siete meses), los hospitalizados bajaron al 7,6% y los de UCI al 0,7, mientras que la mortalidad fue del 1,6% de contagiados.
La tercera ola, la de las navidades del año pasado, sumó en total 43.290 casos, de los que el 7,1% tuvieron que ser hospitalizados y el 0,6% terminaron en UCI, con una mortalidad del 1,4% con respecto a los contagiados.
En la cuarta, ya con los más mayores vacunados, los casos alcanzaron los 33.359, con el 7,5% ingresado y el 0,8% en UCI, con una mortalidad del 0,6%; mientras que en la quinta, con buena parte de la población con la pauta completa, los contagios fueron 41.090, con el 4,3% hospitalizado y el 0,2 en UCI, repitiendo mortalidad en el 0,6% de los afectados.
