El Unicaja visita este Jueves Santo al líder, el Barça, tras su eliminación en cuartos de la Liga de Campeones por el Baxi Manresa en un duelo en el que el único objetivo de los malagueños es intentar ascender alguna posición para acercarse a la novena que da acceso a disputar la próxima campaña la competición europea.
El equipo malagueño ocupa la duodécima posición con doce victorias, a tres del Baskonia, que es octavo, cuando restan siete jornadas para que concluya la fase regular, por lo que la única misión que tiene es intentar desbancar al Gran Canaria, noveno con 14 triunfos, y Río Breogán, décimo con 13 victorias.
El técnico del Unicaja, Ibon Navarro, ha manifestado que quiere de los suyos que acaben "todos los partidos con la sensación de vacío, de haberlo dado todo, de haber peleado juntos o haber jugado como un equipo que pelea”, dijo en declaraciones facilitadas por el club malagueño.
"Va a ser difícil llegar a la décima plaza, va a depender de nosotros, aunque va a haber muchas sorpresas y me gustaría que cuando cojamos el avión todo el mundo pensase que podemos ganar", dijo Navarro, quien garantizó que irán al Palau Blau Grana “a competir al límite" porque, según comentó, tienen "algunas opciones de ganar".
El conjunto azulgrana, que no pierde en casa en Liga Endesa desde el 9 de enero, cuando cayó 95 a 96 ante el Baxi Manresa, es el rival al que más veces se ha enfrentado el Unicaja a lo largo de su historia, con un total de 132 partidos en todas las competiciones, 77 en fase regular con 23 triunfos malagueños y 54 blaugranas.
El técnico cajista Ibon Navarro tendrá la baja del base Alberto Díaz, con problemas musculares en la pierna izquierda.
