Estas detenciones son las primeras de supuestos miembros de ETA que practica la policía autonómica catalana, y se suma a la que realizó ayer la Policía Nacional en Portbou, donde fue detenido otro presunto etarra, identificado como Faustino Marcos Álvarez.
Hasta ahora, los mossos sólo habían detenido, en 2005, a un supuesto colaborador de la banda terrorista por dar cobijo a un terrorista.
Así lo desveló ayer el conseller de Interior, Joan Saura, quien ha resaltado la importancia de la operación policial que ha permitido arrestar en Molló (Girona), cerca de la frontera francesa, a los dos supuestos miembros de ETA.
El único precedente de detenciones del mundo terrorista, aunque menor, se remonta al año 2005, cuando los agentes de la policía catalana detuvieron a un supuesto colaborador porque en 2001 había alojado al entonces miembro del Comando Barcelona de ETA Fernando García Jodrá.
El conseller ha resaltado el compromiso de los Mossos en la lucha contra el terrorismo –“siempre están atentos”, subrayó–, e insistió en que “lo único” que debe hacer ETA es abandonar las armas.
Saura remarcó que por ahora no le consta que la banda terrorista ETA tenga una base operativa en Cataluña, pese a la detención en esta comunidad, entre el martes y ayer, de tres supuestos miembros de la organización terrorista.