La cantante sevillana Pastora Soler lanzó el pasado 17 de noviembre ‘Libra’, su decimotercer álbum de estudio. Como parte de una gira inicial de firma de discos, en apenas unos días se ha recorrido Madrid, Sevilla y Málaga, donde ha estado hoy en el Fnac del Centro Comercial Larios. En una entrevista a 7TV Málaga, ha confesado que volver a firmar es “un rencuentro con toda esa gente que te espera”.
Los discos al final son reflejos de tu vida y de tus momentos vitales, no es lo mismo a lo que le cantaba con 20 años que con 44.Han pasado tres años entre su anterior disco, ‘Sentir’, y la presentación de ‘Libra’. Pastora Soler volverá a la ciudad el 3 de diciembre para actuar en el Teatro Cervantes, donde mezclará canciones de la gira anterior y del nuevo repertorio.
¿Con ‘Rascacielos’, la última canción en salir, quieres lanzar un mensaje de empoderamiento?
Es una canción musicalmente grande, pero el mensaje es lo importante. Todos necesitamos pensar un poco en nosotros mismos. Saber que somos capaces de levantarnos cuando nos caemos, que somos capaces de subir hasta arriba del todo, no solo un poquito. Es un tema con el que quiero transmitir mucha fuerza, empoderamiento y valentía.
Doce canciones muy diferentes.
Hay historias para todo. No todo puede ser canción fuerte y dramática, sino que hay momentos de respiro y para el ritmo, para que te acompañen en momentos diferentes de tu día a día y en distintos estados de ánimo. El objetivo cuando uno hace un disco es que puedas coger la que te pueda ayudar o acompañar.
¿Este disco te ha ayudado durante el parón de tres años?
Siempre vamos con la prisa, así que me ha ayudado poder parar, pensar y forjar un disco muy poco a poco y a fuego lento. El primer single, ‘Qué hablen de mí’, salió hace un año y eso te permite seguir creando ese puzle de canciones y perfilar el sonido.
Han sido tres años de muchas vivencias y todos hemos aprendido de esta etapa y mis vivencias personales, el ser madre por segunda vez, el conciliar, el poder que tenemos las mujeres… hay muchas cosas resumidas en todas esas canciones.
‘Del cielo a mi corazón’ es un homenaje a tu padre recientemente fallecido.
Es transformar el dolor y el duelo. Creo que con el tiempo lo tenemos que hacer. Esas personas no están ya a nuestro lado físicamente, pero sí las sentimos, nos acompañan y están muy presentes en nuestra forma de ser. Yo siento a mi padre cada día y por eso hay una canción que yo me la llevo a mi terreno, pero el objetivo es que cada uno se la lleve a sentir esa energía tan mágica y bonita.
‘No será de nadie’ tiene el toque personal de la malagueña María Peláe.
María es la bomba. Yo no sé qué tiene esta tierra, pero aquí hay mucho y bueno siempre. En esta ocasión me ha acompañado, porque yo la acompañé en dueto a ella en su canción ‘La quería’. En ese momento le hice el encargo, le dije que quería el color de este tipo de canción en este disco, porque también me representa mucho. Así, ella y Alba Reig se pusieron a escribir y me regalaron esta canción que tiene ese rollazo y soniquete.
Has evolucionado personal y profesionalmente.
Los discos al final son reflejos de tu vida y de tus momentos vitales. No es lo mismo a lo que le cantaba con 20 años que con 44. La vida cambia mucho, tus prioridades, el ser madre, el pasar muchos baches en la profesión, te hacen cantar a otro tipo de cosas y te enseñan a valorar otras cosas. Esto te acompaña, tanto a mí como a mi público, que va creciendo conmigo. Las historias que les tengo que mostrar también son diferentes.
