La Fundación Unicaja, que hace pocos días dio un paso más en la sustitución de sus consejeros dominicales en Unicaja Banco, viva una jornada decisiva este jueves, cuando la entidad que preside José Manuel Domínguez va a elevar la propuesta de candidatos al Patronato, con el objetivo de sustituir a los cuatro ‘rebeldes’ actuales, tras haber perdido la confianza.
Los cuatro futuros consejeros, encargados de restablecer el equilibrio entre Unicaja y Liberbank en los organismos de gobierno del banco tras la fusión son: la dirigente empresarial Natalia Sánchez Romero, el profesor universitario José Ramón Sánchez Serrano, el financiero Miguel González Moreno y el exinspector del Banco de España Juan Antonio Izaguirre.
Su elección y nombramiento supondrá poner el fin a la etapa anterior cuando presidía la fundación bancaria Braulio Medel, que dejó su cargo a mitad de este año, y que ha vivido entre la convulsión y la polémica desde 2021.
Así, se cumplirá con lo reportado por la comisión de nombramientos del patronato de la Fundación, conformada por Emilio Alba, Ángela Callejón, Pedro Fernández, Antonio Pascual y Ana María Salinas, que ha sido la encargada de la evaluación de la idoneidad de los sustitutos de quienes han sido hasta ahora sus consejeros de Unicaja Banco (Petra Mateos, Manuel Muela, Teresa Sáez y Juan Fraile).
Por cierto, que en la elección de nombre se había barajado el de Pedro Moreno Brenes, el prestigioso jurista que puso en marcha la Plataforma Salvemos Unicaja, y al que en un documento repartido entre la plantilla del banco UGT había puesto como posible candidato. En el documento al que ha tenido acceso Viva Málaga se indicaba que “hace unos año, pocos daban la cara contra Medel y su voladura de Unicaja a costa de los derechos de los trabajadores y de los clientes de la entidad. Sí hubo una persona que lo hizo, Pedro Moreno Brenes, le plantó cara desde el primer momento, organizando una plataforma que aglutinó a casi 10.000 personas y de la que UGT forma parte, creando una movilización ciudadana que junto a la lucha de los trabajadores ha logrado sacar de la Fundación a los restos del ‘medelismo’”. En el escrito se señala además: “Pero, Unicaja aún está en peligro, y para eso hace falta que los cuatro consejeros dominicales de la Fundación sean personas preparadas y con firems convicciones”, por ello, señalan que “UGT considera que Pedro Moreno Brenes es la mejor apuesta para eso”.
El patronato de la fundación activó el pasado 15 de diciembre este proceso de relevo de sus cuatro representantes en el consejo de administración de Unicaja Banco y uno de ellos -Fraile- optó por dimitir para facilitar el proceso, mientras que los otros, pese a la pérdida de confianza han continuado en sus puestos a pesar de encontrarse cuestionados por contribuir a invertir la ecuación de canje de la fusión en la que Unicaja Banco absorbió a Liberbank con una mayoría resultante del bloque de la antigua Unicaja -con raíz en Málaga- frente a la otra entidad -de origen asturiano- (en torno a un 60 por ciento frente a un 40). Así, se les señaló por alinearse con el bloque del consejo de administración procedente de Liberbank y alterar el reparto de poder interno pactado en la fusión, a lo que se suma que se les achacaba incomunicación con la fundación en la nueva etapa con Domínguez como presidente.
Estos nuevos consejeros dominicales de la Fundación llegarán a Unicaja Banco en un momento crucial ya que se afronta un traspaso de poder o sucesión por la finalización del periodo transitorio posterior a la fusión que debe acabar como máximo el próximo 31 de julio. El banco cambiará su modelo de gobernanza y ahora, el puesto de presidente, que ostenta Manuel Azuaga, procedente de la antigua Unicaja, perderá funciones ejecutivas y se decidirá si el consejero delegado, Manuel Menéndez -originario de Liberbank-, sigue o se elige otro primer ejecutivo. La mayoría de las funciones que ahora recaen en la presidencia deberán transferirse al consejero delegado que haya.
