Las provincias de Huelva y Cádiz son las que registran una mayor brecha salarial, según concluye CCOO en el informe elaborado al respecto con datos de 2021. En concreto, la diferencia es de un 28,3% y un 26,3%, respectivamente.
El estudio detalla que, en Cádiz, los hombres tienen un salario medio anual de 20.457 euros frente a los 15.072 euros de las mujeres.
Tanto nuestra provincia como la de Huelva se encuentran muy por encima del porcentaje del conjunto de Andalucía, que se sitúa en un 20,8%. Hay que tener en cuenta, además, que la comunidad se sitúa quinta en el ranking regional y por encima del porcentaje nacional (19,9%).
El informe indica, con respecto a nuestra autonomía que “las mujeres que sufren una mayor brecha salarial son las de edad superior, destacando las mujeres mayores de 65 años, con una brecha que supera el 42%”.
En cuanto a los sectores económicos, la mayor discriminación salarial se detecta en el sector primario y en otros servicios personales y de ocio. Además, las mujeres con niveles bajos de ocupación son las que presentan una mayor diferencia salarial respecto al hombre.
CCOO destaca, asimismo, que el desglose por tramo salarial de la AEAT “nos permite ver cómo las mujeres tienen mayor peso entre los salarios más bajos (el 50% de las personas que cobran el Salario Mínimo Interprofesional -SMI- o menos son mujeres), mientras que entre los salarios más altos (diez veces el SMI) solo el 14,6% son mujeres. Por eso, el sindicato valora la subida del 52% en los últimos seis años del SMI en España, que ha reducido en general la brecha salarial y beneficia, en el caso de Andalucía, de manera especial a las mujeres entre 16 y 34 años del sector agrícola especialmente.
El estudio apunta a que también han sido clave los planes de igualdad junto con los registros salariales, las auditorias salariales y la valoración de puestos de trabajos, derivados de los cambios normativos, para reducir la discriminación, así como la reforma laboral, “que ha permitido mejorar las condiciones laborales de las mujeres y mejorando su estabilidad laboral”. Pero advierte de aún quedan tarea pendiente. “Son necesarias políticas dirigidas espefícamente a mejorar las condiciones salariales de las mujeres”, concluye el informe.
