La Sección Tercera de la Audiencia de Jaén tiene previsto juzgar este jueves a siete personas, con edades comprendidas entre los 35 y 27 años, acusadas la agresión física y verbal que sufrió un hombre de 51 años y que supuestamente estuvo ocasionada por la condición sexual de la víctima.
A los siete detenidos el Ministerio Fiscal reclama que se les impongan como presuntos autores de un delito de odio dos años de cárcel y multa de 300 euros por un delito leve de lesiones. Además, a dos de los acusados el Ministerio Público les reclama otros tres años de cárcel y multas de 2.400 euros como presuntos autores de un delito de obstrucción de la justicia.
En el banquillo se sentará también como octava acusada una mujer a la que Fiscalía pide una pena de tres años de prisión como presunta autora de un delito de obstrucción a la justicia, según recoge la calificación del Ministerio Fiscal a la que ha accedido Europa Press.
En concepto de responsabilidad civil, Fiscalía pide que los acusados indemnicen a la víctima en 2.500 euros por los daños morales y en 315 euros por los daños físicos. También solicita que indemnicen al SAS en la cantidad que se tase la asistencia médica prestada a la víctima.
El Ministerio Público recoge que la agresión se produjo "sólo porque los acusados no admiten a personas que tengan una determinada orientación sexual", de ahí que optaran por "vejarlo y humillarlo".
Los hechos ocurrieron en la madrugada del 17 de julio de 2021 cuando la víctima, según informó en su día la Policía Nacional, tras asistir a la inauguración de un nuevo pub de la capital jiennense se dirigió hasta su domicilio para volver a salir con la intención de comprar hielo.
Ya en la calle se topó con un joven al que preguntó si sabía dónde podría comprar lo que buscaba. El chico le dijo que no hacía falta ir a ninguna tienda ya que en una plaza aledaña había un grupo de jóvenes consumiendo alcohol y que tan solo tendría que bajar un vaso y éstos se lo darían.
Volvió a su domicilio para coger el vaso y se desplazó hasta donde estaba el grupo con el que llegó a tomarse una copa. Al rato, se fue para comprar tabaco y le acompañó el joven que le ofreció ayuda en la compra del hielo. Un cuarto de hora después regresaron con el grupo y fue entonces, según relató la víctima a los agentes, cuando fue increpado por uno de los jóvenes con palabras soeces y comentarios íntimos, comenzando el resto de grupo a gritarle e insultarle aludiendo a su condición sexual.
Posteriormente, supuestamente le despojaron de su camisa y le arrojaron a una fuente, impactando su espalda contra uno de los caños. Al conseguir salir, ha relatado que le arrojaron bebidas e incluso llegaron a orinar sobre él al grito de "tú eres maricón, aquí no queremos maricones".
El Ministerio Fiscal relata en su escrito el comportamiento "hostil y vejatorio" de los acusados se tradujo en tirarle a la víctima cubalibres sobre su cabeza, bebida "y toda clase de inmundicias" mientras se mofaban del él. La víctima "avergonzado y asustado" logró huir hacia su casa "mientras los acusados lo perseguían", hasta que finalmente pudo llegar a su vivienda.
Los investigadores recabaron diferentes testimonios, así como numerosas pruebas con el fin de identificar y detener a los presuntos autores. Finalmente, la autoridad judicial decretó una orden de alejamiento para amparar a la víctima, mientras que los detenidos quedaron en libertad con cargos.
En lo que respecta a los tres acusados por obstrucción a la justicia, Fiscalía señala que a los pocos días de producirse la agresión se acercaron a un testigo y a la propia víctima para advertirles de que si hablaban iba a tener "serios problemas". También a la mujer de uno de los acusados, y que también se sentará en el banquillo, se le atribuye el haber amenazado de muerte a un testigo.
En su día esta agresión fue condenada públicamente por el Ayuntamiento de Jaén y por la Delegación Territorial de la Fundación Internacional de Derechos Humanos para la Provincia de Jaén.