La estabilidad defensiva en la que se ha metido el Real Jaén no es tan eficiente como el curso pasado pero está entre las seis mejores. Los 18 goles en contra arrojan unos números de 0.9 goles por partido y de ellos hay que significar que los blancos han encajado más de uno en el duelo ante Rincón de la jornada 2; contra el Motril, en la jornada 6; frente al Malagueño, en la jornada 8 y contra el Torre del Mar en la 12. Sumados todos estos tantos hacen un total de 9 dianas. La mitad del total que lleva el Real Jaén recogiendo el balón desde su propia red. Incluso, cuando los blancos reciben más de un tanto es sinónimo de derrota, salvo en el caso en el que los jiennenses no marcaron y terminaron perdiendo en el campo de Huétor Vega por 1-0. Los ocho tantos restantes encajados casi se han dado en las últimas ocho jornadas, donde el equipo ha visto como sus rivales le han endosado seis.
Números que no superan a los del anterior curso, pero sí que demuestran que la defensa está demostrando en los últimos partidos que es más segura que al inicio de la temporada. Esa seguridad se transmite en el bagaje que los de Emilio Fajardo han logrado desde que perdieran su último partido, allá por el 25 de noviembre en el Juan Manuel Azuaga de Torre del Mar. Desde entonces, los jiennenses no conocen la derrota, pese a que los empates en casa ante Almería B y Polideportivo El Ejido le han impedido estar hoy a cinco puntos del Torremolinos.
La noticia estadística que se ha dado este pasado fin de semana es la de enlazar tres partidos consecutivos con triunfo. El empate a cero ante el Polideportivo El Ejido le podría haber hecho sumar cinco, pero ahora hay que mirar al futuro inmediato y ese pasa por la visita al Miguel Moranto. El Real Jaén es muy fiable lejos de casa, donde ha logrado 19 puntos y, además, encaja menos tantos que en La Victoria, donde todo sea dicho, los blancos están igualados a puntos, con 21, con Torremolinos y Torre del Mar. Incluso, con más acierto anotador que sus rivales por el ascenso.
