Llegan semanas siempre temidas por parte de los alérgicos, días en los que los estornudos, picor de nariz, ojos enrojecidos y un amplio abanico de síntomas nos acompañarán jornada tras jornada. Aún no ha llegado lo peor, pues todavía el polen del olivo no ha empezado a amenazar a los jiennenses, siendo ahora época de mayor protagonismo para el polen de las gramíneas, el ciprés o el falso plátano, según destaca a esta redacción jefe de Alergología del Hospital de Jaén, Manuel Alcántara.
Durante esta época, el doctor Alcántara cuenta con una apretada agenda, pues como afirma, ahora son muchas las personas que acuden a su consulta ante los primeros síntomas. Algunos de los pacientes ya han iniciado su tratamiento, pero otros dejan pasar el tiempo hasta el último instante.
Será una primavera complicada para los alérgicos de Jaén. Así lo cuenta Manuel Alcántara, que añade que “habrá una alta polinización, después de las últimas lluvias”. Todo ello se podría aliviar con nuevas lluvias, una vez que se inicie el proceso de polinización del olivo.
A veces, ni siquiera el uso de la mascarilla o el seguimiento del tratamiento son ayudas suficientes para superar una época complicada. Ante ello, el doctor Alcántara recomienda “no acordarse de Santa Bárbara cuando truena, e iniciar el tratamiento a tiempo”. De igual modo, recomienda evitar estar expuesto al aire libre mucho tiempo, no abrir las ventanas de casa o ventanillas del coche, y aconseja pulverizar con agua las habitaciones antes de dormir para rebajar el nivel de polen en suspensión.
Cada vez más alérgicos
Hay algo que preocupa a los especialistas, y eso es el aumento de casos de alérgicos año tras año. El Hospital Quirón expone que alrededor del 20% de los niños en Andalucía sufre alergia estacional, ocasionada por distintos pólenes (fundamentalmente gramíneas y olivo). Más concretamente, el doctor Ignacio Guerrero, especialista del servicio de Pediatría del Hospital QuirónSalud de Córdoba y del Centro Médico QuirónSalud de Jaén, informa que la detección de casos "se va incrementando cada año y que es más frecuente en los más pequeños, al estar su sistema inmunológico aún en desarrollo".
La intensidad de la temporada de alergias puede variar de un año a otro dependiendo de las condiciones climáticas, ha señalado el pediatra. Factores como la cantidad de lluvia, la temperatura y el viento influyen en la producción y dispersión del polen. Precisamente este año, dada la gran cantidad de precipitaciones acumuladas durante la Semana Santa y el aumento de temperaturas posterior, se prevé una mayor cantidad de polen en el ambiente. La edad “también juega un papel importante ya que los niños pequeños son más propensos a desarrollar alergias debido a que su sistema inmunológico todavía está en desarrollo”, ha afirmado.
La alergia estacional infantil, además de afectar a la salud física de los niños, también puede interferir en sus actividades diarias como ir a la escuela, jugar al aire libre o en el sueño. El bajo rendimiento académico y la disminución de la calidad de vida son algunos de los efectos secundarios que pueden tener estas alergias, así como en algunos casos, la necesidad de acudir a urgencias por cuadros de tos y dificultad respiratoria.
En definitiva, un panorama difícil de controlar y detectar su origen. El jefe de Alergología del Hospital de Jaén comenta que la sensación es que “cada vez hay más casos de alergia, y más complejos, al contar con alergias durante todo el año o a diferentes alimentos. Es algo que no nos explicamos”.
