Cansancio, insomnio, irritabilidad, ansiedad falta de apetito. Son solo algunos de los síntomas que según algunos profesionales de la salud se pueden asociar a la astenia primaveral o los cambios bruscos de tiempo. Hay otros que no hablan de este término tan utilizado en el cambio de estación si no que piensan que estos síntomas se deben “a un trastorno adaptivo por el cambio de hora, las alergias y no tanto a un trastorno depresivo”, así lo afirma el psicólogo Abel Santos.
Los hábitos de vida saludable, la práctica de deporte, la realización de técnicas de relajación, entre otras prácticas, pueden ayudar a mejorar estos estados. Juana María Acuña, profesora y coach, ha escrito un libro sobre este tipo de hábitos para que los jóvenes reduzcan los niveles de ansiedad, mejoren la autoestima y trabajen el autoconocimiento. “Son prácticas de sentido común pero que pueden ayudar mucho a tener más energía vital y a afrontar las situaciones desde una perspectiva más positiva”, señala Juana María.
Ambos profesionales coinciden en que los jóvenes sufren más trastornos de ansiedad y depresión sobre todo desde la pandemia. “Aunque suelo tratar a personas adultas tengo pacientes adolescentes y vienen con mucha ansiedad también por la presión en los institutos, sobre todo en los dos últimos años antes del acceso a la universidad”, explica Abel Santos. Según el psicólogo esto se puede prevenir desde los centros educativos enseñando pautas de estudio, de relajación y de control del estrés. “Hay países en los que desde la edad infantil se practica la meditación desde los colegios”, explica Abel.
En cuanto al número de suicidios entre los jóvenes, en los últimos años ha ido en aumento. “El año pasado se suicidaron casi 5.000 jóvenes en España, son datos devastadores porque vivimos en un país desarrollado y tenemos casi todo a nuestro alcance”, afirma Juana. Desde su instituto y de forma particular la profesora trabaja para que los estudiantes tengan claras sus preferencias, sepan manejar sus emociones y aprendan técnicas para valorarse de forma positiva.
Terapias alternativas
En los últimos años ha aumentado la práctica de terapias alternativas para evitar el consumo de medicamentos para la ansiedad o la depresión. Entre ellas se encuentran la meditación, técnicas de respiración, fisioterapia, relajación. “Cada vez se demuestra más la efectividad de este tipo de prácticas que en algunos países tienen una tradición milenaria y que en Occidente se practican desde hace relativamente poco”, según comenta Abel Santos.
Por su parte, Juana María a través de su libro ‘Profe, enséñame a quererme’ da pautas a los estudiantes para que de forma muy sencilla activen el sistema cognitivo, aprendan a utilizar un lenguaje positivo o conozcan las señales de su propio cuerpo.
