Así lo ha explicado el abogado del PP y de Álvarez-Cascos en este asunto, José Ramón Montero, a la entrada de los Juzgados de Plaza de Castilla de Madrid, donde numerosos medios de comunicación esperaban la llegada del ex vicepresidente del Gobierno y actual presidente del Foro Asturias.
El titular del Juzgado número 32 de Madrid, Santiago Torres, había citado a Cascos para que declarara hoy como imputado por un delito de injurias a la Policía por afirmar que existía "una camarilla policial" que falsificaba pruebas del "caso Gürtel".
La Audiencia Provincial de Madrid así se lo había ordenado tras estimar los recursos de la Fiscalía y la Asociación Preeminencia del Derecho -que presentó la querella- contra la decisión inicial del juez de archivar el caso.
La Audiencia de Madrid consideró el pasado mes de marzo que Álvarez-Cascos podría explicar así ante el tribunal la supuesta vinculación de sus declaraciones con la publicación de algunas informaciones, que señalaron que la Fiscalía estaba investigando si la Agencia Viajes Pasadena del cabecilla de la trama "Gürtel", Francisco Correa, pagó al ex dirigente del PP un viaje a Lanzarote.
En este sentido, la Audiencia recordaba que, precisamente, las investigaciones de la Policía determinaron que no existía tal vinculación con las empresas de Correa.
El abogado ha explicado que la petición de inhibición se basa en que el Juzgado número 44 de Madrid investiga desde 2009 los hechos que dieron lugar a las declaraciones de Cascos, en la que el presidente del Foro Asturias ejerce la acusación particular.
Así, el ex vicepresidente, ante la aparición de su nombre en el caso Gürtel dirigió una denuncia a la Fiscalía Anticorrupción, que fue rechazada, y otra posteriormente ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid que recayó finalmente en el Juzgado número 44.
Según ha recordado Montero, la ley establece que dos órganos judiciales no pueden conocer de los mismos hechos, por lo que es al primero que inició las investigaciones al que le correspondería, en este caso el número 44 y no el 32.
El abogado ha indicado también que la primera noticia que tuvo Cascos de esta causa fue a las 20:00 horas del pasado viernes a la salida de un mítin político, cuando la Policía le notificó en Asturias que debía declarar en Madrid.
Montero ha recordado que, como abogado del PP, se hizo cargo de este asunto en 2009 por unos hechos que eran perjudiciales tanto para Álvarez-Cascos como para el PP.
El letrado ha destacado la "enorme confianza" de Cascos en los tribunales de Justicia, razón por la que, ha dicho, ha puesto los hechos en conocimiento del Juzgado, que ignoraba la existencia del procedimiento anterior.
Montero ha explicado que si se admite la declinatoria del Juzgado 32 en favor del 44, las actuaciones serán remitidas a éste, y si ese órgano estimara necesaria cualquier tipo de diligencia, "por supuesto Álvarez-Cascos la hará con todo interés".
No obstante ha considerado que no se dan los supuestos para que se considere un delito de calumnias.
La asociación Preeminencia del Derecho decidió apartarse de la acusación que ejercía en el caso después de que la Audiencia Provincial ordenara que se siguiera investigando el caso al considerar que su seguimiento correspondía a los perjudicados, los policías afectados por las declaraciones de Cascos.