Los costes electorales del PP portuense en las últimas elecciones municipales no se limitaron al gasto propio de una campaña electoral.
La reelección del Sr. Beardo le ha salido y le saldrá muy caro al Puerto de Santa María y a sus arcas municipales
La reelección del Sr. Beardo le ha salido y le saldrá muy caro al Puerto de Santa María y a sus arcas municipales.
El Sr. Beardo tomó la decisión de no incrementar las tarifas del agua porque no era popular antes de las elecciones municipales.
Una vez reelegido nos sorprende con el tarifazo del agua y con una indemnización de más de 1,3 millones de euros a Apemsa-Aqualia por la no subida de tarifa en el periodo preelectoral y a costa de nuestros presupuestos municipales.
También tomó la decisión apresurada, y como medida estrella de su programa electoral, de hacer una pasarela sobre el río que iba a costarnos un 20% de su coste porque Europa pondría el resto. Al final nos va a costar de nuestros presupuestos más de 2,2 millones de euros, el 100%de su valor, y la obra sigue paralizada con visos a que el coste se volverá a disparar.
Viéndose las elecciones encima, consideró que la entrada a la ciudad por Pozos Dulces le costaría su reelección así que nuestro alcalde cegado por no perder las elecciones suspendió las obras del parquin de Pozos Dulces y se apresuró a arreglar la entrada con la fianza depositada por los promotores, mas de 450.000 euros que más tarde o más temprano tendrá que devolver, evidentemente de las arcas municipales.
Pero está mala decisión activó demandas millonarias contra Impulsa, arrastrando a la empresa al Concurso de Acreedores lo que puede suponer la pérdida de bienes tan importantes como la bodega Campbell o el campo de fútbol del Cuvillo entre otros.
Además, se han presentado demandas contra el Ayuntamiento por valor de más de 16,5 millones de euros reclamando préstamos otorgados para la obra.
Discutida decisión la del Sr. Beardo que viendo como se le podía escapar su reelección optó no por una negociación con los acreedores que tienen muy bien amarradas sus reclamaciones, sino que pone en riesgo la viabilidad económica de este Ayuntamiento anteponiendo su ambición política a los intereses de los vecinos portuenses.
Queda claro que el Sr. Beardo mira por su futuro político pero su cuenta millonaria la pagamos entre todos.