El presidente de la Diputación, Paco Reyes, acompañado por la vicepresidenta primera y diputada de Igualdad, Políticas Sociales y Juventud, Francisca Medina, y por la diputada de Igualdad y Juventud, María Dolores Ruiz, ha presentado el IV Plan Provincial para la Igualdad de Mujeres y Hombres de la Administración provincial en un acto al que han asistido alcaldes y alcaldesas de la provincia de Jaén, representantes de los grupos de desarrollo rural e integrantes del Consejo Provincial para la Igualdad y Participación de las Mujeres Jiennenses, entre otros. Este Plan, aprobado por el pleno de la Diputación, se estructura en torno a 83 medidas agrupadas en 11 líneas estratégicas que definen la hoja de ruta hasta 2027 “para hacer de esta provincia un lugar en el que la igualdad sea una realidad incontestable en cada uno de sus 97 municipios”, ha señalado Reyes.
“La igualdad es algo trasversal que afecta a todas las políticas que ponemos en marcha desde la Diputación Provincial. En ese sentido, pretendemos poner toda la estructura de la Diputación a disposición de este plan y de los ayuntamientos, y hacerlo de la mano de las mujeres de la provincia”, ha afirmado el presidente de la Administración provincial, que ha puesto de relieve el proceso participativo para su elaboración. “La implicación de colectivos de toda la provincia para su redacción es una de las fortalezas de este plan, porque la consecución de la igualdad real es algo que concierne a toda la sociedad y que debe implicarnos a todas y a todos”.
Las líneas estratégicas del IV Plan para la Igualdad de Mujeres y Hombres aseguran que la igualdad de género esté presente en todas las políticas de la Diputación; incluyen medidas enfocadas a la economía, el empleo y el emprendimiento, con especial atención a la empleabilidad de la mujer rural; insisten en el fomento de la participación ciudadana y el asociacionismo; impulsan el empoderamiento y el liderazgo de las mujeres en la esfera pública; promueven la educación en valores de igualdad para la transformación social; ponen el foco en la conciliación corresponsable y el fortalecimiento de las infraestructuras para el cuidado; sitúan como prioridad la prevención y erradicación de las violencias machistas; fomentan una comunicación institucional incluyente y no sexista; promocionan la calidad de vida a través de la salud y el deporte; y atienden a la diversidad humana.
“Somos conscientes de que éste es un plan vivo, que tiene que ir adaptándose a las nuevas circunstancias y aprovechando las oportunidades que surjan de aquí a 2027, siempre con el objetivo de la igualdad real entre hombres y mujeres, y aportando todo lo que podamos desde un ámbito que es clave en cualquier política, como es el municipalismo”, ha remarcado Reyes, que ha reconocido que “queda mucho trabajo, concienciación y educación para lograr una igualdad real y efectiva”. En este sentido, el presidente de la Diputación ha recordado los pasos dados desde la puesta en marcha del primer plan, en el año 2006, mediante el impulso de estrategias que se han adaptado al contexto. “Cada plan ha ido construyendo una base aún más sólida, adaptándose a los desafíos de cada momento. Un recorrido que nos ha llevado a promover la igualdad y eliminar la discriminación con acciones positivas y transversales, un trabajo que se reforzó con un segundo plan que puso el marco para la creación del Área de Igualdad y Juventud, promoviendo la corresponsabilidad institucional y reforzando la transferencia de las políticas de género a los ayuntamientos, y que continuó en el tercero poniendo el foco sobre los principios de igualdad efectiva, la participación ciudadana, la corresponsabilidad y el enfoque integrado de género”.
Este IV Plan Provincial para la Igualdad de Mujeres y Hombres, que además de un compromiso representa un plan de trabajo, se aplica en el ámbito local con una incidencia directa sobre los ayuntamientos a los que la Diputación presta asistencia y asesoramiento también en materia de igualdad. Asimismo alinea el trabajo realizado en la provincia con lo global, ya que relacionada cada una de sus estrategias con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Con vigencia hasta 2027, cuenta con un sistema de seguimiento y evaluación para identificar dificultades, mejores prácticas y lecciones aprendidas en relación a cada una de las medidas, con indicadores de resultados, desarrollo e impacto.
