Hoy me he tenido que tomar la pastilla y me encuentro más fresco. Y es que los locos llevamos mucho tiempo tirándonos de los pelos y echándonos las manos a la cabeza por ver lo que tenemos que ver y escuchar todos los días. Aparte de los mafiosos con los que nos desayunamos cada mañana, por nuestros ojos desfilan: el tarado que mata a su hijo y se suicida, el otro que por sus pocas luces deja olvidado a su hijo dentro del coche hasta la muerte, los niños hambrientos con su plato vacío luchando codo a codo para abrirse paso por un poco de comida, los que se ahogan debajo de un cayuco… Pero ¿qué pasa ahí fuera? ¿Desapareció la conciencia? ¿Es normal?
Menos mal que, en contraste con estas salvajadas, hay gente que se entrega de corazón a disminuir en la medida de lo posible todos esos sufrimientos con una cosa tan simple como es un juguete. Este pasado sábado la Asociación de Reyes Magos de La Isla se fue a Conil a celebrar su reunión anual, junto con las de Peñaflor, Constantina, Tomares, Mairena, Conil, Chiclana, Jerez y la Algaida.
Este loco tuvo la suerte de asistir y de comprobar en sus carnes no solamente el calor que hizo en el chiringuito de la playa, antesala del mismo infierno, sino también los lazos cordiales que unen a estas asociaciones. La de San Fernando, como las demás, se rigen por unos valores que hoy se están relajando de una forma alarmante: la solidaridad, la colaboración, la tradición… Y sobre todo se lanzan sin paracaídas con el único motor de la ilusión, porque el objetivo de todos es que ningún niño se quede sin juguete el día de Reyes. Alguno de ustedes se preguntará: ¿cómo es que en pleno mes, en una sofocante playa, estos señores se reúnen para verse, darse la mano, comer juntos y volver a poner la vista en el lejano horizonte de enero? La única explicación es porque están tan locos como los que aquí dentro seguimos encerrados. Y, además, no les importa pasar como tales, si a cambio consiguen la sonrisa de un niño, de un anciano, de un discapacitado.
Esta movida la inauguró Antonio Sánchez Aguilera, de feliz memoria, y en San Fernando alimenta la llama del cariño hacia los más débiles una junta directiva de locos compuesta por su presidente Juan Fernández, su vice el Juanini, Lolo Bernal, Diego Montero y su mujer Carmen Rodríguez. Todos locos de remate, que por lógica funcionan más con el corazón que con la cabeza. A esta gente hay que apoyarlos con todas las de la Abel, porque se dejan los sudores cada año en el propósito más bonito que puede tener el ser humano. No me dio por preguntar qué apoyo económico tenía cada una de estas asociaciones por parte de sus respectivos ayuntamientos, aunque me quedé sorprendido con la fuerte dotación económica con que decía contar la Asociación de Chiclana.
Por otra parte, el próximo miércoles día 4 de junio se celebra el Día Internacional contra la agresión a los niños. Mientras tanto, siguen los descerebrados en sus lujosos despachos jugando a la guerra y presumiendo de los ataques que están haciendo a costa de segar la vida de miles de inocentes niños. Al terminar la reunión, los conileños nos obsequiaron a cada uno de los asistentes con un cajillo repleto de tomates, de pepinos y de pimientos cogidos de las huertas de Conil, gloria pura. Este loco lo ha traído todo al manicomio y vamos a hacer un gazpacho, que seguro va a poner nuestra cabeza en orden.