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Málaga

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“Es un cuento que salió solo, como algo que debía salir de mí en el momento adecuado”

Descube en esta entrevista el libro tan especial que prepara Esther Ráez, la comunicadora y hermana de Pablo Ráez

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  • Esther en los estudios de 7TV Andalucía en Málaga. -

Esther Raéz es hermana de Pablo Ráez, ese joven que fue y es un referente en tantas cosas buenas, como haber hecho viral una campaña de donación de médula, que a él no le salvó, pero que sirve a muchas y muchos. Es malagueña, comunicadora y escribe, en general, cosas para adulto, lo que se ha saltado con el proyecto que tiene ahora entre manos: ‘Sofía y el Misterio del Cielo’, un libro necesario, que desentrañamos en esta entrevista.

Al hilo del fallecimiento de de tu hermano, surgen una serie de cosas que te llevan a plantearte un cuento ¿Cómo es esto?

Surge más bien de la necesidad que tiene mi hija, que tiene ahora mismo cinco años y medio, de integrar la ausencia del Tito Pablo, porque mi hermano, a pesar de que hace ahora ocho años de su partida, sigue estando muy presente, no solo en la vida de todos los andaluces y de los malagueños, sino en mi propia casa, en mi familia, seguimos hablando de él, vemos sus fotos, vemos sus vídeos, en Marbella que es donde vivimos, tiene su propio bulevar con su nombre, el centro de urgencias, en fin que hay muchísimos recordatorios de la figura de mi hermano. Está super presente en nuestra casa. Mi hija no le ha conocido, porque ha nacido después de su muerte, pero es como si se sintiera muy conectada al escuchar tanto del Tito Pablo.

Y aquí surge la idea del libro, ¿no?

A través de sus preguntas, a través de su propio desarrollo, ella va creciendo y yo voy creciendo con ella a la par, y entonces, su manera de preguntar las cosas va siendo un poquito más elaborada. Me vi con una conversación que se repetía en el tiempo y yo decía, bueno, será que mi hija Sofía necesita le dé una respuesta un poquito más entera, un poquito más sólida dadas las circunstancias de que yo no sé cómo se va el cielo ni cómo se muere uno ni nada ¿No? Ese es el germen del cuento. Conocemos el hecho biológico, conocemos los sentimientos, pero es que es esto ese gran misterio de la vida, ¿No? Es un misterio increíble y a través de ella la verdad que ha sido muy bonito andar este camino, porque ella, lo que he sentido, es que me plantea preguntas bastante metafísicas. Claro que no está pensando en la metafísica, simplemente está pensando en darle sentido a algo que no cuadra muy bien: “Pero mamá, si el Tito Pablo se puso malito y estaba aquí y se murió. ¿Cómo es que tú me dices que está en el cielo? ¿O está aquí o está en el cielo? ¿Dónde está mamá? ¿Y si está en el cielo? ¿Cómo ha llegado ahí?” Así, en conversación con ella, mientras pintamos, hacemos otra cosa o cocinamos, viene con este tipo de preguntas que son superlógicas y yo digo que son metafísicas porque los niños no tienen los conflictos del ego que tenemos los adultos y entonces un adulto quizás también se pueda preguntar ¿Cómo es posible que mi hermano pequeño haya muerto aquí pero yo lo sé presente conmigo aquí? No nos lo preguntamos abiertamente, bien por cultura o por no sé, por quizás por tabú o porque no queramos en el fondo expresar este tipo de preguntas pero, sí que son preguntas que tienen que ver pues con quiénes somos, de dónde venimos,
dónde vamos.

Hay civilizaciones que tienen rincones en el hogar dedicados a los difuntos. Nosotros ya quizás en occidente no, pero ha existido asistido históricamente y todavía se da en algunos lugares.

Sí, se me viene a la mente la cultura de México, es verdad, no lo había pensado así pero tienen esta devoción a sus altares, y los ponen en casa y con el tema este de la Catrina que es la muerte en sí misma. Es cierto que tienen… y, seguramente, muchas otras, En nuestro caso, la dicotomía que yo veo ahí es que, para nosotros es tabú. Sí. La muerte todavía lo es y lo he comprobado. He estado trabajando en Cudeca muchísimos años. Y he estado en contacto con enfermos terminales y el proceso de final de vida, no solo por mi hermano, precisamente por todas estas personas y familias que pasan por allí. Es algo de lo que nos cuesta mucho hablar y sin embargo, quizás a través de los niños sería una manera muy fácil de hacerlo, porque ellos no tienen ese problema cultural, ese conflicto, te van a preguntar directamente.

Hemos recordado precisamente a tu hermano, a Pablo, muy querido, que hacía deporte pero, es que no sabes si te va a tocar o no, pero por su leucemia. Y puso en marcha aquella iniciativa para la donación de médula, y no sé cómo valoras actualmente la situación del legado de él.

¿La situación de su legado?, Es que me cuesta mucho trabajo seguirle la pista a todas las acciones y todas las cosas que se hacen por mi hermano. Yo diría que el legado sigue creciendo, y no es porque yo lo esté empujando activamente, a pesar de que yo ayudo al proyecto solidario Siempre fuerte, el proyecto que llevamos a cabo gracias a la obra de Fernando Quirós, el pintor jerezano que hizo un diseño muy bonito con la silueta de mi hermano con el brazo levantado, y bueno, ayudamos cada año a una causa. Este año es Fundación Héroes. Pero aparte de eso, todo lo que yo recibo son mensajes de agradecimiento, mensajes de, cómo mi hermano les ayudó en un momento determinado, en su vida, y si no cuando mi hermano estaba todavía vivo pues después, incluso hay personas que se han tatuado a mi hermano. Con esta imagen de Siempre fuerte…es una cosa… es brutal.

Es también la idea de que nos quedamos con lo positivo, de que somos capaces de tener esperanza, de sembrarla

Sí, eso fue uno de los fuertes de mi hermano y con el cual él se pudo relacionar muy bien y supo expresarlo. Siempre me preguntan, esto que quizás no lo que me has preguntado, pero siempre me hablan de cómo mi hermano hizo esta campaña, que se hizo tan viral sobre la donación de médula, y es curioso, porque no nos acordamos, pensamos que la viralidad ha estado siempre aquí, pero en los días de mi hermano no existía la viralidad, fue uno de los primeros en hacerse viral. Sí. Y lo único que hizo fue su canal habitual de comunicación, porque mi hermano ya era nativo digital,  que se nos olvida, pero él nació con internet, entonces, para él ese era su medio de comunicación natural con sus amigos y aquello digamos que floreció y explotó y al final hubo muchísima gente que se sintió atraída por el mensaje de mi hermano y su manera de contarlo y todo esto, pero él no pensó “voy a hacer una estrategia de comunicación para hacerme viral con esto”. Luego ha habido otras personas que se han enfermado, que si han sido más conscientes y han intentado poner luz sobre su problema en las redes, pero digamos que mi hermano fue el primero quizás o uno de los primeros que hizo esto y bueno su legado yo creo que empieza a construirlo él mismo y diría que sigue él mismo, que sigamos conduciéndolo, porque es como una cosa muy de sentir para que no tengo una prueba fehaciente de esto, pero así es como yo lo siento.

Hay que hay que seguir manteniendo ese llamamiento a que la gente done médula que es un proceso que no es doloroso y que crea ese banco maravilloso para las personas que puedan necesitarlo.

No es doloroso, como bien dices y es inicialmente es dar una gota de sangre para la red de donación de medula mundial. Tienen tu perfil genético para saber si eres compatible con alguien que está en necesidad. En el mundo. Y nosotros aquí en España, somos medio pioneros, somos participantes activos. En España se dona muchísimo, hay un porcentaje altísimo de donantes de médula y órganos. Somos muy importantes en el en el tejido de lo que es la donación de sangre y órganos. Tenemos que estar muy orgullo de esto y hablarlo, siempre que podamos porque es cierto, no solo porque mi hermano lo dijese, pero es un hecho. Así que solamente con una gota de sangre ya pueden tener nuestro perfil genético y si surge la posibilidad nos van a llamar.

No sé si el hecho de todo esto que estamos hablando, toda esta presencia que sigue habiendo de tu hermano a este nivel inmaterial y en cosas concretas, el reconocimiento, la Fundación, os ha ayudado o algunas veces os ha cansado, no sé si sirve para que la vida siga o hay quien se apoya muchísimo en estos gestos y hay quien se siente muy cansado, cansada porque viene a ser un recordatorio constante.

La realidad es que vivimos con ello. Va pasando el tiempo y digamos que la ausencia se va colocando, el dolor se va transformando un poco. Eso es cierto. Hay que ser pacientes con uno, ser paciente con uno mismo. Y esperar el tiempo que haga falta hasta que el dolor va mitigando un poco y sí que es verdad que cada persona lo procesa de una manera diferente, pero al final del día, si la gente se acuerda de tu hermano, de tu hijo, de tu sobrino, sientes agradecimiento. No estás solo en el recuerdo. En nuestro caso somos afortunados sí. Por esto, porque no estamos solos en el recuerdo de mi hermano. Es verdad que si voy por Marbella y tengo que pasar por el bulevar Raéz Martínez a mí se me coge un pellizquillo porque…, además es que es mi nombre. Es mi nombre. Yo me llamo Esther Ráez Martínez. No siento que no siento nada hacia mí misma, lo que siento es que es una cosa increíble que esté nuestro nombre en calle y que sea porque mi hermano no está. Es muy bonito pero también es doloroso. No es solo el dolor de que no está mi hermano, es el dolor de una familia entera.

Has comentado eso de darle ritmo cada persona, y sin prisas, dos palabras, sin prisas que son casi inconcebibles los tiempos que tenemos.

Sí, es verdad. Acelerados y empujados, Es cierto que somos un poquito tóxicos con esto de ser  positivos, ¿no?, tienes que superarlo ya; venga, anímate, venga, no lo pienses más. En realidad son cosas muy poderosas. Que se te muera alguien de tu familia especialmente que se te vaya alguien que no debería haberse ido antes que tú, eso es poderoso y no habría que meterle prisa a nadie para que supere nada. La naturaleza del ser humano va a hacer que de manera bastante lógica cada persona vaya integrándolo a su ritmo y su tiempo. Si tu familia y tu entorno ayudan en esto es mucho mejor, porque es un proceso mucho más sano y saludable. Si te encuentras solo desayuno porque hay muchas personas que al final se encuentran solas en un proceso de de pérdida, es más difícil y se puede enquistar más ese dolor, pero no hay que empujar a nadie a que supere nada. Especialmente una pérdida. Eso forma parte de la vida. Estamos preparados.

Hemos hablado poco del cuento, de Sofía y el Misterio del Cielo, un cuento infantil ilustrado que aborda con sensibilidad y belleza el proceso de duelo en la infancia.  ¿No? Primero hay que decir que todavía la gente puede ayudar a este cuento,

Sí, sí. Lo más importante. Vamos a explicarlo. El cuento está en campaña de preventa ahora mismo porque, el mundo de la editorial ha cambiado mucho los últimos años y ahora los escritores noveles como yo, ponemos nuestro nuestra obra en una plataforma que tu editorial, mi editorial Karambuco, me facilita, y ahí se pone el libro en preventa, hemos hecho un ‘booktrailer’ muy bonito que se ven las ilustraciones, hay un resumen de lo que es el cuento, de quién es la ilustradora, Cristina Barba, y ahí cada persona puede tener un poco una sensación de lo qué es el cuento, de lo qué se va a encontrar y puede convertirse en mecenas, puede prereservar su cuento, compra el cuento o el número de cuentos que quiera y, por haberlo hecho en preventa, se le mandará una postalita, unos marcapáginas dependiendo del número de cuentos que quiera reservar. Y cuando ya pase un mesecito, que creo que queda un mes de esta campaña de preventa, se manda el libro a imprimir y a final de verano estará en todas las librerías de España y veremos las presentacione.

 

¿Cómo ha sido el proceso para escribirlo y publicarlo?, ¿qué  ha sido lo más complicado a la hora de de plantearlo y hacerlo?

Me pasó una cosa preciosa. Me gusta mucho contártelo porque no, no me ha resultado nada complicado escribirlo. Fue una especie de, pareció, como dictado. Yo me puse a escribir y salió solo. No digo que saliera solo porque soy yo quien lo escribe, pero fue como algo que debía salir de mí en el momento adecuado. Yo escribo otras cosas. Yo no escribo nada para niños. Todo lo que escribo es para adultos. Y me salió un cuento infantil, creo que, supongo, que en mi mente estoy inmersa en esta fase de mi hija que pregunta mucho, y me salió esta explicación para ella y cuando lo terminé pensé que era el momento adecuado para buscar una editorial que se interesara por el cuento. Y tuve la suerte de que Carambuco, que es una editorial que está en Barcelona y especialista en literatura infantil y juvenil, quisieran publicar mi cuento. Fue una alegría, , como un hito histórico en mi vida. Me pareció superbonito y pensé ojalá mi hermano esté orgulloso de  este momento.

Imagino que hacer un libro así tiene un proceso dónde vas a enseñar pero donde tú estás aprendiendo también.

Sí, claro que sí. Claro. Yo conforme lo iba escribiendo, es cierto que fue muy fluido, muy fluida la escritura, pero es verdad que tuve que ordenar el pensamiento bastante, volverme a poner en esa situación en la que yo estoy hablando con mi hija Sofía y ella me hace preguntas desordenadas, pero en mi mente tengo que darle respuestas relativamente coherentes acerca del tema: pues mamá, ¿cómo ha llegado el tío Pablo al cielo?, ¿está en una nube?, ¿si miro arriba veo al Tito Pablo?, ¿en qué nube exactamente está?. ¡Cómo le das lógica a que el Tito Pablo se ha sentado en una nube!. No la tiene para nosotros. Imagina para explicárselo. Eso fue un poco lo quizás lo más complejo, pero realmente el recurso estilístico y literario que yo encontré para eso fue hacerlo como cariño y pintárselo como lo que es, un cuento. Que le ayude a ella a imaginarse cosas y a un poco a sosegar esas preguntas, esas reflexiones que le van le van surgiendo y esperando que esto le dé una buena base para la siguiente fase de Sofía que sea en la que ya ella entiende que esto era un cuento y que podemos seguir haciendo otras preguntas, podemos indagar más. NO ha visto el cuento en sí mismo, porque no lo tenemos todavía, Cristina Barba me va mandando ilustraciones y yo le voy enseñando a ella, cuando vio la ilustración de ella, del personaje protagonista que es Sofía dijo, “¡mamá, ese soy yo!. Le encantó. Es que además, Cristina ha sabido encontrar ese punto realista. Es verdad que hay personas que comprarán el cuento y no nos conocen personalmente, entonces no saben cuánto se parece mi hija a la ilustración, pero los que sí nos conocen van a alucinar porque realmente es que son muy bonitas y muy tiernas.

Al final son personajes universales, ¿no?

Sí, exactamente. Preguntas, un personaje universal. Sí. La madre y el padre que buscamos respuestas. Exactamente. Hay cosas muy bonitas que están pasando ya a pesar de que lleva en preventa poquito tiempo, pero ya me han llega algunos mensajes de familias que tienen un hijo o una hija en situación de últimos momentos de vida, ¿y tienen hermanos, hermanitos y han comprado el cuento para los niños y claro, si tiene algún sentido la muerte mi hermano, este es uno de ellos, que la historia a través de nosotras y gracias a él sirva para estas familias que están en ese trance tan horroroso.

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