Efectivos del Consorcio de Bomberos del Poniente han extinguido este jueves el incendio de un vehículo que se encontraba aparcado en la calle Plutón de la barriada de Puente del Río en Adra (Almería), donde esta semana murió un joven de 23 años a tiros y donde, la madrugada siguiente, se prendió fuego de manera intencionada a cuatro viviendas.
Fuentes del servicio unificado de emergencias 112 Andalucía han confirmado a Europa Press el aviso recibido sobre las 14,10 horas en el que se alertaba de la presencia del coche en llamas, por lo que se dio aviso a Policía Local, Guardia Civil, Protección Civil y Bomberos, que sofocaron el fuego.
El siniestro no ha dejado heridos y solo ha provocado daños materiales. Por el momento, se investiga si el incendio ha sido provocado de forma deliberada al tiempo que se trata de identificar al propietario del coche, conformen han añadido fuentes de la investigación.
El alcalde de Adra (Almería), Manuel Cortés (PP), reclamaba este miércoles en el marco de una junta local de seguridad un refuerzo "permanente" de Guardia Civil y un incremento de medios materiales para garantizar la seguridad en esta localidad costera tras el crimen de la mañana del lunes, que se habría iniciado tras una discusión por el volumen de la música, y las represalias posteriores.
La investigación confirmó que las viviendas a las que se prendió fuego durante la madrugada del martes pertenecían a miembros del 'clan de los saules', a quienes se achacaría inicialmente el crimen del joven, que pertenecía al 'clan de los lateros', cuyos miembros han sido investigados por su presunta vinculación al 'petaqueo' en la zona.
Fue sobre las 3,15 horas cuando se recibió un aviso por varias viviendas en la calle Júpiter de la citada barriada abderitana. Las llamas afectaron fundamentalmente al mobiliario de cada una de las casas incendiadas.
El siniestro guarda relación con la multitudinaria pelea registrada en la mañana del lunes, en una plazoleta situada en la calle Marte, entre una veintena de miembros de dos familias de clanes diferentes. Desde entonces, se mantiene la situación de alerta policial ante la posibilidad de nuevos incidentes y sin que se hallan producido ni identificaciones ni arrestos.
