SOS socorristas

Un año más, El Puerto de Santa María comienza su temporada veraniega sin el Servicio de Socorrismo y Vigilancia en pleno funcionamiento. Y es que, desde que Beardo es alcalde, solo un año se ha llegado a junio con el Servicio a pleno rendimiento, y fue gracias a una trampa administrativa.
Antes, los alcaldes lucían orgullosos las banderas azules Esto, en una ciudad turística y costera, no solo daña nuestra imagen, sino que mina la confianza de quienes vienen a disfrutar de nuestras playas. Y para colmo, no solo es grave la falta de servicios, sino el intento de maquillar la situación por parte de Beardo, tratando de engañar a todos con una nota de prensa, negando lo evidente, mientras posa ridículamente con algunos policías locales, voluntarios de Protección Civil y un único socorrista.
En 2021, perdimos las banderas azules porque el contrato de socorrismo no se activó hasta mediados de agosto. En vez de ampliar la temporada para compensar, decidieron partir el contrato por la mitad y usar lo que quedaba para arrancar 2022. Ahí está la trampa, ese año sí comenzamos con contrato, pero solo hasta mediados de agosto. Resultado: otra vez sin socorristas en pleno verano. 
En 2023 el contrato no entró en vigor hasta finales de julio, salvando in extremis las banderas, pero no la mala imagen. Y ya en 2024, ni eso, por lo que, a sabiendas de que las iban a perder, ni siquiera se izaron las banderas azules. 
Este 2025 el panorama no pinta mucho mejor. Hemos comenzado la temporada sin socorristas y con unos servicios mínimos a la espera de que el contrato entre en vigor, el pliego recoge que el servicio debe comenzar el 1 de julio, ya muy tarde, pero de poco sirve si, como en años anteriores, tampoco se cumple.
Antes, los alcaldes lucían orgullosos las banderas azules. Hoy, ¿por qué Beardo y sus concejales no se hacen la foto recogiéndolas o izándolas? Solo caben dos explicaciones: o no les gustan las fotos (poco probable), o han aprendido la lección y evitan posar para imágenes que puedan volverse en su contra cuando, una vez más, El Puerto quede en evidencia.