Durante el último mes del pasado ejercicio, las entregas de automóviles en el mercado español alcanzaron 66.458 unidades, lo que supone un descenso del 3,6% respecto a los datos contabilizados en diciembre de 2010.
Estas cifras ponen de manifiesto que 2011 fue uno de los peores ejercicios de la historia en cuanto a volumen de matriculaciones en España y sitúan al mercado automovilístico español en niveles cercanos a los contabilizados en 1993, cuando se entregaron 792.500 unidades.