El viaje de este año es el undécimo consecutivo que se realiza y en él participarán el otorrino Antonio Caravaca –uno de los promotores desde los inicios-, la enfermera de Quirófanos Isabel Fernández, y las auxiliares de enfermería Purificación Alonso y Concepción Leal, todos ellos del centro hospitalario algecireño.
Al igual que en ediciones anteriores, los objetivos de la expedición son asistir a la población en el área de otorrinolaringología y formar al personal sanitario local. Y es que, los principales problemas de salud que se detectan entre la población saharaui se localizan en los ojos, los oídos y la laringe, principalmente provocado por las condiciones de vida y el clima de la zona. Sólo el pasado año, se atendieron 800 pacientes con patologías de este tipo.
El otorrino Antonio Caravaca ha destacado la intención de los profesionales participantes es seguir aportando a los refugiados saharauis una atención equiparable a la que se puede ofertar en Andalucía, con las limitaciones propias del terreno. Asimismo, ha apuntado que aunque los profesionales sanitarios son conscientes de las circunstancias penosas de los campamentos, acentuadas por los secuestros de tres cooperantes en octubre pasado, todos acuden a esta cita con ganas e ilusión.
La ONG Enyanin fue constituida hace ya diez años entre profesionales sanitarios del Servicio Andaluz de Salud del Campo de Gibraltar, y posteriormente se le han ido sumando otros sanitarios de Jerez, Sevilla, Cádiz y Marbella, en su mayoría profesionales del sistema sanitario público andaluz. Durante los diez años que se ha realizado esta expedición, se han atendido a alrededor de 6.000 pacientes en diferentes especialidades, como Anestesia, Cirugía General, Ginecología, Odontología, Oftalmología y Otorinolaringología. Además, se han realizado unas 500 intervenciones quirúrgicas mayores y se ha participado en la formación de estudiantes de enfermería locales y en la especialización de los enfermeros en matronas.
La asistencia sanitaria en los campamentos, como la alimentación y otras necesidades vitales, depende de la cooperación y la solidaridad internacional. Y es que, las personas que viven en estos campamentos disponen de dispensarios para la asistencia sanitaria más básica y de un rudimentario hospital nacional, dotado de medio millar de camas, donde se realizan las intervenciones quirúrgicas no ambulatorias, que dependen también de la ayuda internacional.
La Junta de Andalucía desarrolla diversos programas solidarios en el ámbito de la salud y facilita la incorporación de profesionales sanitarios como cooperantes en organizaciones no gubernamentales, mediante permisos retribuidos, como en el caso de este equipo de sanitarios gaditanos.