No teman queridos lectores del FARO INFORMACIÓN, que no les voy a castigar con un microensayo sobre los cuentos populares y literarios de esa gran potencia que es China, ni tan siquiera voy a pretender desarrollar mi tesis sobre como deben desarrollarse las distintas partes de esta breve narración ficcional protagonizada por un grupo reducido de personajes y con un argumento sencillo.
Nada de eso es la pretensión de este humilde articulista con el título de esta columna periodística. Más bien si ustedes me lo permiten en este domingo en el que nos encontramos en la recta final del mes de agosto, es que reflexionemos juntos algunos minutos sobre las historias con las que nos intentan embaucar algunos políticos, empeñados en creerse muy listos y a nosotros demasiado torpes.
Y por favor, que nadie se llame a engaño que lo de adjetivarlo como chinos, no guarda ninguna relación con el reciente viaje del alcalde de Algeciras y diputado del PP, Don José Ignacio Landaluce, que en su calidad de Vicepresidente de la Comisión de Exteriores del Congreso ha estado por tierras de la República China o sea Taiwán, pregonando nuestras excelencias y atrayendo inversiones para nuestro país y particularmente para nuestra ciudad y Comarca,
Además estoy seguro, que cuando descanse de tantos kilómetros de viaje dará cumplida cuenta de los proyectos que se van a llevar a cabo, como consecuencia de tan importante misión. Aquí y ahora, no es ese mi cometido, ya que la oposición municipal desde el partido socialista le ha formulado y formulará cuentas preguntas considere oportunas y usted, como siempre, amablemente les dará detallada respuesta directamente o en la Comisión de seguimiento del alcalde a la que “nunca falta.”, salvo que esté en Madrid o se encuentre dedicado a otras tareas.
De todas formas ,hay cuestiones extrañas que usted debería aclarar en el plazo más breve posible, más que nada para evitar malos pensamientos, y es como la Comisión de Exteriores, a decir verdad solo diputados del PP e incluso alguno que ya no lo es, ha visitado la República de China, país con el que España no tiene relaciones diplomáticas y cuyo representante de la oficina económica y cultural taiwanesa Javier Ching –Shan Hou , ha sido presentado como embajador en las dos ocasiones que ha visitado Algeciras. Sin duda se tratará de una confusión, que usted aclarara sin problemas.
Debería usted también aportar la agenda del viaje al completo, para que nadie pueda albergar incertidumbres, siguiendo lo que usted pregona, claridad y transparencia, e imagino que los integrantes de la comitiva se habrán coordinado con el Gobierno de España, a través del Ministerio de Industria y Comercio para que no se vean dañadas nuestras relaciones e intereses con la República Popular China. Ah y espero que nos muestre usted todo el álbum fotográfico del viaje, además de las que ya hemos visto en la prensa escrita y digital.
Aclarado el tema porque si no después se me enfada Don José Ignacio y yo lo que quiero es que esté contento y sea feliz, he de decirles que en cuestión de cuentos, hay políticos que los manejan casi todos, así tenemos los especialistas en los de la buena pipa o los de nunca acabar, que he de reconocer que eran los que más me irritaban de pequeño y lo siguen haciendo de mayor, cuyo termino o solución resulta indefinida y parece no llegar nunca.
Para entender esta modalidad, observemos con detenimiento la práctica del presidente del gobierno de España, Don Mariano Rajoy, que lleva negando el rescate por parte de la Unión Europea o llamándolo de mil maneras distintas, y cuando se produzca no nos lo vamos a creer.
También se da con muchas frecuencias entre algunos ejemplares de la fauna política, los cuentos de la lechera, esos proyectos ambiciosos o esas promesas incumplidas, que después el contraste con la realidad las torna quiméricas y decepcionantes, y si no que los señores y las señoras del PP hagan un acto de contrición e impónganse la penitencia, por vendernos hace tan solo ocho meses que el país cambiaría, lo que no aclararon que era a peor.
En medio de tantos pequeños relatos chinos o de otra especie, están aquellos que se dedican a llevar y traer cuentos o quienes viven del mismo y que nos recuerdan a esas bellas estrofas de una canción de Serrat del disco 1978, titulada Por las paredes, “que la ignorancia no te ciegue, que no trafique el mercader con lo que un pueblo quiere ser”.
