La defensa de José Bretón, el padre que supuestamente asesinó a sus dos hijos, Ruth y José, el 8 de octubre de 2011 en Córdoba capital, y para el que pide la absolución, ha solicitado la comparecencia de más de 150 testigos y peritos para el juicio con jurado, que las partes prevén que se celebre a finales de abril o en el mes de mayo en la Audiencia Provincial de Córdoba.
Según recoge la calificación del letrado José María Sánchez de Puerta, a la que ha tenido acceso Europa Press, la defensa hace suya la relación de testigos y peritos que ha propuesto el Ministerio Público, cerca de 150, y la acusación particular, unos 80, si bien el abogado cita ocho más.
Entre los testigos que pide que acudan a la sala se encuentran dos vecinos de la calle Pintor Velázquez, junto al Parque Cruz Conde, donde Bretón supuestamente dice que perdió a sus hijos, y un médico forense de los juzgados de Córdoba, que determinó que los restos de la hoguera de la finca de Las Quemadillas eran de animales, así como tres agentes policiales más.
Mientras, en el apartado de peritos, solicita la comparecencia del director gerente de Tanatorios de Córdoba, Manuel Olivares, y un ingeniero de Telecomunicaciones.
"SIMPLE FALTA POR IMPRUDENCIA"
En el escrito, el letrado, que renuncia a la celebración de la audiencia preliminar, como han hecho las otras partes, apunta que los hechos que defiende "no constituyen delito alguno", con la supuesta pérdida de los niños en el Parque Cruz Conde la tarde del 8 de octubre de 2011. No obstante, cree que "podría apreciarse" para Bretón "una culpa 'in vigilando' en la custodia de sus dos hijos menores, lo que encuadraría dicha figura en una simple falta por imprudencia".
Asimismo, anuncia que en "el momento procesal oportuno", de conformidad con la Ley del Jurado, y en cumplimiento de los mandatos constitucionales, va a alegar "nulidad del procedimiento por violación de derechos fundamentales, tutela judicial efectiva y a un proceso con todas las garantías". Y es que, a su juicio, son "nulas todas las pruebas obtenidas con flagrante violación de los derechos fundamentales".
Al respecto, muestra su "total disconformidad" con el relato de los hechos que efectúa tanto el Ministerio Público, como la acusación particular, que piden penas por 40 años de prisión por dos delitos de asesinato con alevosía, además de indemnizaciones de 600.000 euros y unos dos millones de euros, respectivamente.
En este sentido, la defensa de Bretón mantiene que los restos óseos hallados en la finca familiar de Las Quemadillas, que en un principio se determinó que eran de animales, fueron cambiados por "la presión mediática", e indica que "sus múltiples traslados con falta de garantías procesales", a juicio del letrado, no pueden llevar a la conclusión de que esos sean los restos de los menores desaparecidos.
Además, subraya que "los restos óseos que constan custodiados en el Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba no se corresponden con los primeros restos encontrados en la hoguera y de los que dos profesionales acreditados certificaron su origen animal y no humano", en este caso la perito de la Policía Científica y un médico forense de los juzgados de Córdoba. En definitiva, sostiene que "los primitivos restos óseos han sido sustituidos por restos óseos humanos, de edades comprendidas entre los dos y los seis años".
