El corredor eslovaco Peter Sagan, del Cannondale, se ha adjudicado la séptima etapa del Tour de Francia del Centenario, disputada entre Montpellier y Albi sobre 205,5 kilómetros, tras batir al sprint al alemán John Degenkolb (Argos-Shimano) y al italiano Daniele Bennati (Saxo-Tinkoff).
Peter Sagan culminó con éxito un ataque largo del Cannondale para sumar su decimocuarta victoria de 2013, la primera en esta edición del Tour, después de varios intentos frustrados en los que había quedado a la sombra de otros especialistas puros como Mark Cavendish, Andre Greipel o Simon Gerrans.
El guión previsto en una etapa de 'media montaña', a las puertas la montaña de los Pirineos, con cuatro puertos, uno de ellos de segunda, el Col de la Croix de Mounis, 6,7 kilómetros al 6,5 por ciento, casi en el ecuador de la misma, quedó echo añicos por la ambición de los corredores 'verdes' del Cannondale.
Sagan dijo a sus compañeros que tensaran el ritmo en el Col de la Croix de Mounis, donde la cabeza del pelotón se tiñó del verde fluorescente del Cannondale y se quedaron cortados gran parte de los rivales del eslovaco para disputarle el triunfo en la recta final de Albi.
Con tres ciclistas en cabeza, el belga Jan Bakelants (RadioShack), que se vistió dos días con el jersey amarillo de líder; el francés Cyril Gauthier (Europcar) y el español Juan José Oroz (Euskaltel), la etapa se tornó en una crono entre el Cannondale en un primer grupo y el Omega Pharma Quick-Step y el Lotto, en el segundo.
El pulso lo ganó el Cannondale, que atrapó al trío cabecero a apenas 3 kilómetros de la meta, mientras Cavendish y Greipel se dejaron llevar en los últimos 30 kilómetros y acabaron cediendo casi 15 minutos en la llegada.
Pese a que Degenkolb buscó la sorpresa con un acelerón temprano, Sagan cumplió con su parte y enseñó la rueda a todos sus rivales bajo la pancarta de meta, en la que mostró el nombre de su patrocinador en agradecimiento al trabajo de sus compañeros de equipo. "Muchas gracias, sin ellos no lo habría logrado", apuntó Sagan a las cámaras.
El sudafricano Daryl Impey (Orica GreenEdge), que aguantó el tipo en en ese primer pelotón, alargó su gesta histórica -primer africano líder en la 'Grande Boucle'- y mantuvo el amarillo la víspera de la octava etapa, la primera en los Pirineos, de 195 kilómetros entre Castres y Ax 3 Domaines.
Después de coronarse una 'tachuela' de cuarta categoría, la Côte de Saint Ferreol, se ascenderán las empinadas rampas del Col de Pailhères, de categoría especial por sus 15,3 kilómetros al 8 por ciento, y la meta estará ubicada en Ax 3 Domaines, de primera.