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Los empleados de la cafetería de la estación están en la calle

Matilde Cruz lamenta la falta de sensibilidad del alcalde y apunta a que la intención podría ser que se instalase una multinacional de comida rápida sin subrogar los contratos

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  • Cafetería al fondo -

Seis familias más sin trabajo y una estación de autobuses de una capital de provincia por la que pasan al año alrededor de dos millones de viajeros sin cafetería. Es la denuncia que hizo ayer la concejal socialista Matilde Cruz, que acusa al equipo de gobierno del PP y al alcalde, José Enrique Fernández de Moya, de falta de sensibilidad una vez más con los seis trabajadores de la cafetería de la estación de autobuses, local, que como el resto del recinto, pertenece al Ayuntamiento de Jaén.
“El alcalde ha dado el pistoletazo de salida para liquidar la estación de autobuses”, asegura Matilde Cruz, que considera que ante el obtuso futuro de los centros comerciales anunciados por el alcalde, el equipo de gobierno pretende agilizar el cambio de uso de la estación. En ese sentido, apunta a que una multinacional de comida rápida estaría interesada en establecerse en la que hasta antes del verano fue la cafetería de la estación de autobuses. En este sentido, Matilde Cruz insta al alcalde a no dejar en la estacada a los seis trabajadores y le pide que subrogue sus contratos, tal y como hizo el PSOE en el año 2009 en la oferta de contratación que realizó y que recogía textualmente en su punto número seis, que “la empresa arrendataria habrá de subrogarse en los contratos de trabajo actualmente suscritos con los trabajadores empleados”. Sin embargo, Matilde Cruz lamenta que ahora el Ayuntamiento se desentienda de ellos y no obligue a la nueva empresa a mantener sus puestos de trabajo.

Sólo alquiler
Por su parte, el presidente de EPASSA, Juan José Jódar, respondió a la denuncia socialista instando al PSOE a que explique por qué firmó un contrato con una empresa (Catevirgo), el pasado año 2009 para un periodo de diez años, que contaba como administrador a Antonio Morales, “condenado por diversos delitos relacionados con fraudes, y que estaba vinculado con altos cargos socialistas como Juan Guerra, hermano del exvicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra”. En cuanto a los trabajadores, Jódar dice que no se pueden subrogar sus contratos y que será la empresa la que decida.

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