La Universidad Pablo de Olavide y la Universidad de Sevilla "endurecimiento" de las condiciones para los estudiantes Erasmus después de que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte haya establecido, a través de una orden publicada la semana pasada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que los seleccionados este curso escolar 2013-2014 para la 'aportación complementaria' del Estado para la beca Erasmus --unos 150 euros al mes-- tienen que haber sido a su vez adjudicatarios de una beca general el curso pasado, es decir, haber estado exentos del pago de la matrícula.
El vicerretor de Estudiantes de la UPO, Modesto Luceño, ha señalado en declaraciones a Europa Press que "no por negativa deja de ser sorprendente" esta noticia, toda vez que se pregunta "qué cabos le faltan ya para atar al Ministerio, en el sentido de detrimento de la calidad de la universidad pública". Además, recuerda que los argumentos del propio ministro Wert eran que este programa tiene como objetivo que "la gente vea otras culturas y aprenda de estos sistemas educativos", y ahora "resulta que le retira la subvención el Ministerio a aquellos alumnos que no hayan obtenido beca", critica.
"Es una barrabasada", añade Luceño, quien dice que "están cansados de ataques directos contra lo público", e insiste que desde la Olavide "valoran muy negativamente" este decisión que supone "un paso atrás en derechos adquiridos", de forma, además, "tan gratuita". "No nos entra en la cabeza", lamenta el vicerrectora, quien además critica que "el Ministerio tiene la costumbre de no contar en absoluto con las universidades". Por último, ha indicado que "ya se verá qué medidas se toman desde de las universidades", aunque en principio "las expectativas son que la Junta de Andalucía --que paga una parte de la beca-- no tiene pensado este tipo de recortes".
Por su parte, la Universidad de Sevilla, a través de un comunicado, considera que estas aportaciones complementarias "no deben estar sujetas a condición alguna, como la de haber sido becario del Ministerio, que en todo caso sería un mérito más para obtener un mayor complemento", al tiempo que afirma que "deben ser, como hasta la fecha, aportaciones suplementarias que ayuden a cualquier estudiante que por mérito y capacidad haya obtenido una plaza destino Erasmus". "De esta forma se libera la aportación procedente de la UE a través del Organismo Autónomo de Programas Educativos Europeos (Oapee), además de las que se realizan desde la mayor parte de las comunidades autónomas", añade.
Asimismo, la Hispalense subraya "la inconveniencia añadida de introducir una cláusula restrictiva no conocida por el estudiante en movilidad, una vez que el alumno se encuentra en destino y ha asumido los costes de su estancia en previsión de la ayuda que tradicionalmente ha estado ofreciendo el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte".
Por último, señala que el Programa Erasmus es un programa de gran "relevancia" para la Universidad española "habida cuenta de los resultados cualitativos y cuantitativos obtenidos en los 25 años en funcionamiento". Además, destaca que "ha significado un nítido camino de internacionalización, aquilatando el número de relaciones docentes e investigadoras entre las universidades españolas y las del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES)". De este modo, afirma que "cualquier merma en su apoyo y seguimiento tendrá graves consecuencias en los procesos de conformación del EEES, de internacionalización de las universidades españolas y de la consecución de los objetivos de la Estrategia Europea 2020.
Asimismo, desde la Universidad de Sevilla aseguran que "el debilitamiento del programa Erasmus va en contra de los propios objetivos de internacionalización declarados por el Gobierno de España".