El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Sevilla, Juan Espadas, ha trasladado su preocupación por la situación de "expulsión de usuarios" que puede producirse en la práctica del deporte base en los barrios "por el proceso de privatización de instalaciones municipales iniciado por el alcalde de la ciudad, Juan Ignacio Zoido, con 24 infraestructuras públicas pagadas con dinero de todos a las que ha puesto en mercado a disposición del mejor postor y con el único objetivo de hacer negocio".
En un comunicado, el socialista ha señalado que "el vicio de origen en esta privatización de todo el deporte base supone que aquellas instalaciones municipales más atractivas se regalan a empresas privadas a las que sólo mueve el interés de hacer negocio".
Así, explica que "son las que están en muy buenas condiciones de mantenimiento y el Instituto Municipal de Deportes (IMD) ni exige mucha inversión ni tampoco mucho canon". En ellas, prosigue el socialista, "se explotarán las máximas posibilidades de afluencia y uso para sacar el máximo rendimiento económico a las pistas municipales expulsando a los clubes que tradicionalmente venían utilizándolas con fines más sociales que deportivos".
Sin embargo, en instalaciones modestas como la de San Pablo, menos atractivas para las empresas, a juicio de Espadas, han tenido que ser los directivos de los propios clubes constituidos como empresas los que den el paso adelante optando a la concesión, "la única forma al menos de intentar que el club pueda seguir haciendo uso de las pistas, pueda seguir en competición y la práctica deportiva no se vea interrumpida con efectos demoledores para un importante número de pequeños y jóvenes cuya actividad diaria vinculada al barrio está encauzada en la vertebración social que favorece el equipo".
En otros casos, como Sendai, Sevilla 3.000 o La Ranilla, la oferta municipal "ha quedado directamente desierta sin empresa ni club que se encargue de su gestión sin que se plantee ahora ninguna alternativa de uso por parte del Gobierno local", ha explicado el portavoz socialista.
Espadas y la concejala Encarnación Martínez se han reunido esta semana con el club San Pablo a los que de cara a la próxima temporada se les presenta "una situación difícil". "Están atados de pies y manos puesto que tendrán que hacer frente a gastos de mantenimiento, luz y agua sin ningún tipo de ayuda municipal. Los únicos ingresos serán aquellos que consigan generar a sabiendas de que no podrán subir el coste de inscripción en el equipo porque las familias del barrio acabarán por no renovar a los pequeños", ha lamentado.
En su opinión, Zoido "ha roto el deporte base. Ha destruido el concepto de clubes de barrio para sustituirlos por el de socios o clientes y se acaba con la vertebración social. Aquellos hijos de familias que puedan pagar la ficha seguirán practicando deporte mientras se expulsa a los que no puedan pagar el precio-coste". Y prosigue afirmando que el alcalde "rompe además el equilibrio generado con la posibilidad de que aquellas instalaciones municipales más rentables compensen a las que lo son menos"
Por todo, Espadas pide al Gobierno local "que plantee un análisis serio de la realidad a la que desemboca este modelo y de sus consecuencias, y apruebe un conjunto de ayudas municipales que garanticen la continuidad en el uso tradicional que de estas infraestructuras públicas han venido haciendo los clubes de barrio".