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El alcalde de San Roque denuncia que las exigencias de Fomento frenan el carril peatonal hasta el Casino

El carril proyectado uniría la zona de Cuatro Vientos con el Casino. Se trata de uno de los lugares más transitados para andar y hacer ejercicio físico. El Ayuntamiento remitió en octubre a la Demarcación de Carreteras el anteproyecto.

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  • Camino del Casino -

Las exigencias del Ministerio de Fomento están frenando la construcción del carril peatonal hasta la zona del Casino, proyectada por el Ayuntamiento de San Roque, según ha denunciado el alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix.

El Ayuntamiento remitió en octubre a la Demarcación de Carreteras (Ministerio de Fomento) el anteproyecto de un carril bici que sirva también como senda peatonal entre San Roque Casco y el Casino. La longitud total es de casi 3.200 metros, si bien gran parte del trazado coincide con el arcén de la vía de servicio ya existente.

El carril proyectado uniría la zona de Cuatro Vientos con el Casino. Se trata de uno de los lugares más transitados para andar y hacer ejercicio físico. Es un anexo a la vía de servicio que es competencia del Ministerio de Fomento, “y de nuevo existen dificultades a la hora de encontrar una cooperación por parte del Gobierno Central”, indicó el alcalde.

El alcalde explicó que “nos obligan a una serie de inversiones que entendemos no son las adecuadas. Nos fuerzan a tener que recepcionar esa vía de servicio cuando no está en condiciones de ello. Lo que han de hacer es arreglarla y mejorarla, y entonces la recepcionaremos”.

“Hay un primer tramo muy difícil en la parte del Casino, desde el club de tenis Gaviota hasta la primera parte de una carretera abandonada, que tiene mayor estrechez donde los técnicos municipales están trabajando para innovar un espacio que permita un presupuesto bajo y que al mismo tiempo se pueda realizar”, indicó el alcalde.

A partir de esa carretera abandonada “sí existe una anchura mayor donde nos están pidiendo una serie de protecciones que entendemos que son necesarias, pero que podemos realizarlas en unas condiciones más económicas de las que nos vienen exigiendo”.

El alcalde explica que “es eso lo que principalmente tiene paralizada esta actuación, por lo que pediría desde aquí la cooperación y colaboración de todas las administraciones para que este proyecto se pueda llevar a cabo”.

Ruiz Boix recuerda que “es un proyecto que demandan los ciudadanos y creo que en el caso del Casino, tan transitado por tantas personas, podrían tener una mayor seguridad alrededor de esa inversión tan necesaria”.

“La mayor inversión -declaró- se prevé para el tramo donde no existe arcén, unos 770 metros partiendo de La Torrecilla. Ahí habría que actuar sobre el terreno natural siguiendo las curvas de nivel. El resto, ya por el arcén de la vía de servicio, conllevaría una inversión mucho menor, porque tan sólo habría que pintar el piso, acondicionarlo donde sea necesario y también instalar una barrera de seguridad que separe a los usuarios de los vehículos a motor”.

Las obras consisten en la adaptación del arcén izquierdo de la vía de servicio de la A-7, entre San Roque y el Casino, para convertirlo en un camino protegido que pueda ser utilizado como carril bici y/o senda peatonal. Se pretende permitir el uso seguro y compartido entre peatones y ciclistas, manteniendo un arcén mínimo de seguridad según lo establecido en las Normas de Carreteras. En la actualidad este recorrido se realiza por un número cada vez mayor de peatones, en unas condiciones de seguridad muy deficientes: en el primer tramo del recorrido por la vía de servicio desde San Roque no existe arcén; en el resto, aunque el arcén tiene una anchura muy superior a la exigida en la normativa, no existe protección ni separación física.

El trazado de la actuación, con un recorrido total de 3.170 metros, tiene su origen en San Roque, en el acceso más oriental de la ciudad. Como en los primeros 770 metros más cercanos no existe arcén, se actúa sobre el terreno natural siguiendo las curvas de nivel. Se ha proyectado el carril/senda con un ancho constante de 2,3 metros en todo el recorrido, dejando 0,7 metros de separación con la calzada de la vía de servicio, espacio que se usará para la colocación de la barrera de seguridad. En el tramo que no existe arcén se colocará un vallado de madera a cada lado.

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