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El Gallinero

Merche derrocha gaditanismo por los cuatro costados en su pregón

La lluvia no pudo ni con la artista ni con el público un prego

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La pasión, la entrega y las ganas que Merche puso anoche en el Pregón del Carnaval de Cádiz pudieron con todos los elementos en contra. La lluvia se empeñó en ser protagonista también y un chaparrón fuerte poco antes de la hora de inicio del acto hizo temer por la suspensión.

Finalmente, la lluvia remitió su ritmo, aunque de forma intermitente siguió en San Antonio. Eso sí, no pudo con la cantidad de gente que ates- taba la plaza con ganas de ver y oir a la exitosa cantante ga- ditana pregonar la fiesta.

Fue, sin duda, un derroche de gaditanismo puro y como ella mismo dijo “hoy me he dejado un cachito de alma en Cádiz”. Fue un pregón carnavalero cien por cien. La cantante se centró en los cuatro enclaves más representativos de la fiesta grande de la ciudad: Santa María, Mentidero, la Viña y la Caleta. El pregón, así, estuvo dividido en cuatro partes claramente diferenciadas por las que Merche repasó coplas históricas acompañada de ilustres carnavaleros.

Merche tuvo un compañero de excepción. Nada menos que Emilio Gutiérrez Cruz, el Libi, quien se merece un pregón aparte, ejerció de guía turístico acompañante de la cantante y provocó los momentos más hilarantes entre el numeroso público que atestó San Antonio con su particular estilo.

También hubo tiempo para la música de la propia pregonera, aunque las coplas fueron, sin duda, las verdadras protagonistas del acto de anoche. En Santa María contó con la bulla del grupo flmenco Toma Castaña, que montó toda una fiesta en el escenario de San Antonio. La chirigota del Love la acompañó durante su paseo virtual por el barrio del Mentidero.

Juntos cantaron un par de pasodobles. Bustelo, vestido de Los Acuarelas, también estuvo sobre las tablas. Ya en La Viña se encontró con el coro de Faly Pastrana. Juntos entonaron el tango Tengo dos no- vias del coro La Plastilina y Las Habaneras de Cádiz. El 3x4 lo puso Manolito Santander. El final de trayecto fue La Caleta, a la que cantó junto a Miguel Nández. El momento más emocionante fue cuando salió su padre, Catalán chico y todos cantaron la presentación de la comparsa Caleta.

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