Las obras consisten básicamente en la construcción de 5.530 metros cuadrados de acerado con terminación en hormigón ruleteado, con juntas formadas con ladrillo cara vista, así como otros 5.302 metros cuadrados de acerado formado por losas de terrazo de 36 tacos sobre solera de hormigón en masa a ejecutar en las avenidas principales. En materia de iluminación, se trasladarán las columnas existentes en las calles secundarias hacia la calzada, se crearán las arquetas de alumbrado público y se construirán alcorques entre las farolas para la posterior plantación de arbolado.
En cuanto a la red de pluviales se van a demoler los pavimentos existentes para la ejecución de 1.760 metros lineales de canalización para aguas pluviales con sus correspondientes imbornales, se excavarán las zanjas para la colocación de la red, rellenándose posteriormente con zahorra natural, y se conectará la red de drenaje con las arquetas mediante canalizaciones de PVC con tuberías reforzadas de 315 mm. Del mismo modo se instalarán los correspondientes sumideros y se crearán los pozos necesarios para que la evacuación de las aguas se realice con total efectividad. Posteriormente, se repondrá el acerado en iguales condiciones que el demolido anteriormente.
Estas actuaciones afectarán a las calles Cerceta, Camchuelo, Herbita, Avoceta, Ánade, Colibrí, Oca, Malvasía, Cuco, Ostero, Alcotán, Lugano, Herrerillo, Grevol, Clínico y Quetzal, así como a la avenida Gran Vía y al parque Pérez Corso.
El alcalde ha recordado a los vecinos que en una reunión similar celebrada hace tres años se comprometió a actuar en la urbanización por fases. Así, la primera fase fue la relativa a la mejora del suministro eléctrico y la segunda, la que se inicia, el lunes. Román se ha comprometido a impulsar una última fase consistente en el soterramiento de los cables de electricidad y telefonía y el asfaltado de toda la urbanización, un proyecto que se redactará próximamente para conocer el presupuesto de la operación y así poder estudiar las opciones para su financiación. El alcalde, que ha respondido a casi una treintena de cuestiones, ha dicho que no puede poner una fecha a esta última fase de actuación, pero que se compromete a abordarla en cuanto presupuestariamente sea posible. No obstante, ha informado que la empresa adjudicataria destinará 200.000 euros en mejorar el asfaltado de las calles principales.