El delegado municipal de Servicios Sociales, Francisco José Salado, ha anunciado que desde esta Delegación se destinarán para este curso escolar casi 28.000 euros en ayudas a las personas que más lo necesiten. Así pues, se han puesto en marcha nuevos recursos que servirán para ayudar a las familias con mayores dificultades sociales y económicas ahora que comienzan las clases. “Se trata de la concesión de unas becas educativas para material escolar a los centros públicos y concertados para los ciclos de Infantil y Primaria”, explicó el edil de Servicios Sociales.
Para el presente curso se ha previsto la cantidad de 18.000 euros, que irán destinados a este concepto y que se repartirán entre los 21 centros de la ciudad. “La cuantía que le corresponde a cada colegio se hace en función del número de alumnos y alumnas de dicho centro y dicho importe se reparte o bien comprando material para el total de alumnos y alumnas de los ciclos de Infantil y Primaria, o bien comprando material para los niños y niñas con dificultades económico-sociales de familias concretas”, aclaró Salado.
Dicho material escolar lo podrá comprar el mismo centro educativo en cualquier papelería de la ciudad que estime oportuno, ya que con ello “pretendemos que se beneficien el mayor número de papelerías de Chiclana”, destacó el delegado municipal de Servicios Sociales.
Además, de cara el nuevo curso que ahora empieza, desde esta Delegación se ha estudiado la posibilidad de aumentar esta partida para becas educativas. “Así pues, vamos a destinar casi 10.000 euros más para complementar estas ayudas a los centros. Unas ayudas que serán gestionadas directamente por Servicios Sociales. Serán por tanto casi 28.000 euros los que se emplearán para ayudar a la compra de material escolar, solo que en esta ocasión no se incrementará la partida destinada a los centros, sino que se destinará a pagar dicho material desde Servicios Sociales, Familia e Infancia a aquellas familias que vengan solicitando este recurso y desde el centro escolar no se le haya podido atender en su totalidad”, explicó Salado.
También hay que tener en cuenta que hay adolescentes que estudian la ESO u otro ciclos formativos y que no pueden pagar igualmente el material o los libros. “Con esta nueva partida, se pretende dar solución a estas situaciones de necesidad. Nuestra intención es llegar al mayor número de ciudadanos posible, porque no queremos que la falta de dinero sea una causa para dejar de estudiar o para retrasar el nivel de los alumnos y alumnas”, incidió Salado, que destacó que desde el equipo de Gobierno “creemos que los menores merecen una atención integral y con estas becas educativas estamos promoviendo la calidad de la educación para todo el alumnado con independencia de sus circunstancias o condiciones sociales o económicas. Con esto y en definitiva, lo que estamos promoviendo es la igualdad de oportunidades y la no discriminación”.
El delegado del área de Servicios Sociales ha mantenido una reunión con los responsables de los centros educativos de la ciudad para informarlos de estas ayudas y fijar unos criterios comunes en el reparto del material. “En este sentido, tenemos que destacar la buena disposición y la coordinación entre la Delegación de Servicios Sociales y la comunidad educativa para este fin común”, recalcó Francisco José Salado.
