La Caja Negra acogerá el jueves la presentación del nuevo número de TeVeo. Actuarán Electrohúmedos. Antes se celebrará un acto en el consulado francés, con la presencia de la cónsul. Rafa Iglesias conversó con Viva.
¿Qué nos encontremos en este TeVeo?
–Nos solidarizamos con Miguel Sevillano, secretario provincial del sindicato CGT, querellado por un gabinete de abogados “cristianos” por ejercer la sagrada libertad de expresión durante la manifestación del 1 de mayo pasado. Le dedicamos nuestro póster central, que sin duda meterá el dedo en la llaga para más de uno y una. Y anunciaremos públicamente la futura consolidación de la asociación VITA, Víctimas de Integrismo Teísta Asociadas, una agrupación civil de legítima y jurídica defensa de la ciudadanía presionada por la intransigencia religiosa. Casos como el de Miguel, Leo Bassi o Javier Krahe demuestran lamentablemente su necesidad.
De nuevo horror en el país vecino
–Para los sucesos de París casi no tengo palabras. Sólo rechazo visceral por sus consecuencias. Por todas sus consecuencias. No solo por la patente amenaza terrorista que planea sobre nosotros, sino por la reacción occidental que de buen seguro irá a peor de forma exponencial. Desde el incremento de las actitudes racistas y el rechazo hacia los exiliados y emigrantes, hasta posible y desgraciadamente una guerra tan fuera de lugar y contraproducente como lo fue la de Irak, que no sólo estamos pagando nosotros, defendiendo el petróleo de las multinacionales con la sangre de nuestros compatriotas. No digamos los propios iraquíes. Todos estos lodos vienen de muy atrás. Sin la colonización europea de África, sin la marginación de los árabes y expolio de sus recursos, sin las masacres de Gaza ni la desidia internacional hacia la causa palestina, el fanatismo no tendría cantera para mártires suicidas. Pero otra vez el horror y la sinrazón han vuelto a golpear. Cuando fue sobre nuestros compañeros de Charlie Hebdo, algunos justificaron mezquina y torpemente el asunto diciendo: “Claro, por meterse con sus creencias”. Pero los desalmados han atestiguado y dejado claro, bien claro, que ningún ciudadano, francés, europeo o demócrata, está seguro.
Se habla mucho en nuestro país de nacionalismos, de mayor o menor alcance
–Para nosotros son “necionalismos”. El nacionalismo que nosotros concebimos es uno sin fronteras. Una identidad abierta a las ideas, la libertad, la tolerancia y la convivencia pacífica entre las personas. Desde el TeVeo promovemos humildemente un papel activo en la defensa y promoción democrática de la libertad de pensamiento. Estamos interesados en iniciativas para luchar a través del humor por el respeto cultural y la libertad de expresión. Nos interesa reforzar la posición de la cultura crítica como una plataforma transversal de intercambio, diversidad y pluralidad, de difusión de valores de y desde la democracia. Valores universalistas que comparten una misma visión de los valores humanistas democráticos y de la razón crítica, que debe ser la base de toda expresión libre.
¿Cómo combatiría esa barbarie?
–Con esos mimbres combatiremos al fundamentalismo. El que sólo merece condena democrática y justicia. Ni mezquindad ni odio, ni venganza ni ignorancia. Porque eso nos convertiría en ellos. Y nosotros no somos ellos. Nosotros somos Charlie Hebdo. Y París. Y Mahoma es un símbolo nuestro, de los pacíficos.
