El proyecto para la creación de un hotel de cuatro estrellas con 33 habitaciones y piscina proyectado por la empresa Torres y González Díaz S.L frente a la bahía de Los Genoveses en el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar (Almería) ha provocado el rechazo de más de 6.500 usuarios, quienes se han expresado en contra del proyecto a través de la plataforma Change.org.
Los internautas han suscrito una petición dirigida a la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento de Níjar en la que muestran su negativa al proyecto y en la que se cuestionan "cómo puede ser compatible un hotel" con el parque natural "con todo el impacto para la naturaleza casi virgen de la zona".
Asimismo, los firmantes se plantean si es que "quieren cargarse el parque natural" con "otro Algarrobico" en referencia al polémico hotel ubicado en la playa de Carboneras de 411 habitaciones y más de una veintena de plantas sobre el que pesan varias sentencias judiciales en su contra.
"No más ladrillo en pleno parque natural. No más atascos en los carriles de las playas del parque natural, como si fuera la Gran Vía de Madrid. Sí a un turismo ecorresponsable", añade el escrito, en el que también se recoge el intento de "crear un chiringuito en plena playa de Mónsul" en relación al centro de servicios litorales licitado por la Junta, cuyo expediente quedó finalmente anulado ante las "voces críticas" que se pronunciaron en contra.
Cabe recordar que la asociación Amigos del Parque Natural de Cabo de Gata manifestó su "cautela" y "preocupación" por el proyecto a desarrollar a partir de la rehabilitación y remodelación del denominado Cortijo Las Chiqueras, ya que, según entienden, puede crear un "precedente peligroso" en este espacio.
En esta línea, los ecologistas estudian interponer alegaciones al proyecto tanto ante la Junta de Andalucía como ante el Ayuntamiento de Níjar (PSOE-IU) ante el "impacto" que puede generar un establecimiento hotelero de estas características ante uno de los "emblemas" del parque natural, dado que, de cualquier manera "va a incrementar la presión sobre el parque".
"Creemos que hay una serie de factores ambientales que están en cuestión", han explicado desde la entidad conservacionista, donde temen que esta situación dé pie a que "aprovechando cualquier ruina se pueda construir un hotel" máxime frente a una playa "no urbana" donde se carece de servicios turísticos, lo que ha contribuido a su preservación.
En concreto, el proyecto básico prevé un presupuesto de contratación de 2.014.495 euros para la remodelación y puesta en marcha de este espacio, que prevé distribuir las 33 habitaciones en seis grupos de viviendas, dos de las cuales serían de nueva construcción mediante la "traslocación" de estructuras ya edificadas para acoger 13 de las habitaciones; todo en un espacio de 2.376,5 metros cuadrados.
El documento contempla también un gran patio ajardinado central que comunica el edificio principal con los espacios libres del complejo y con el resto de edificios, de modo que, como "elemento articular" entre la gran zona arbolada existente y los edificios destinados a zonas comunes se situará una piscina "que se caracterizará a la manera de una alberca tradicional".