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El año en el que Irene García afianzó su liderazgo en el PSOE

Las dirigente socialista logra el control del partido en la provincia compaginando el poder institucional y el orgánico y sumando a ‘sanchistas’ y ‘susanistas’

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  • Irene García con los nuevos líderes locales del PSOE -

Durante 2017, el PSOE ha estado inmerso en un proceso interno de renovación de sus órganos de dirección y control tanto en el federal, regional, provincial y local. Pedro Sánchez se impuso en el nacional, Susana Díaz se mantuvo en el andaluz y en la provincia de Cádiz salió reelegida secretaria general, pero a diferencia de la anterior cita, en este año ha reforzado su liderazgo.  En julio de 2012 obtuvo la dirección del partido con una candidatura renovadora por sólo 46 votos de diferencias con su contrincante, el barbateño Rafael Quirós, que era el candidato oficialista del partido. En 2017, Irene García fue la única precandidata en el proceso de primarias que superó la cifra requerida de avales de la militancia, 1.008 firmas, presentando 2.677 avales válidos. No fue necesario proceder a los trámites encaminados a la votación por los militantes en el congreso.

Irene García ha tenido la habilidad de sumar a su proyecto a los llamados antiguamente pizarristas y de lograr un amplio apoyo de las agrupaciones locales.

El liderazgo de Irene García se asienta sobre tres patas o tres personas. Una de ellas es Manuel Jiménez Barrios, que además de ser presidente del PSOE provincial, es el mayor cargo institucional que los socialistas gaditanos tienen: vicepresidente de la Junta de Andalucía y mano derecha de la presidenta autonómica, Susana Díaz. Barrios ha sido una persona clave en el proceso.

Juan Cornejo es otro elemento fundamental para comprender la fortaleza del proyecto de García. Secretario de Organización la comisión ejecutiva regional, es también senador y parlamentario andaluz.

La pata restante es la propia Irene García, que además de ocupar la secretaría provincial general es la presidenta de la Diputación Provincial de Cádiz.

Tres personas que tienen en común el compaginar el poder orgánico del  PSOE con el institucional, lo que es clave para entender el triunfo de la que ha sido la primera mujer en lograr la presidencia de la Diputación y de dirigir a su partido en la provincia.

Y es que en sus 138 años de historia, está claro que en el PSOE la bicefalia no suele funcionar y sí el liderazgo en el que cohabitan el poder orgánico y el institucional. El hecho de que el PSOE recuperase el gobierno de la Diputación Provincial y que Irene García obtuviese la presidencia de esta entidad ha sido primordial para entender su posterior triunfo en la secretaría general. Si no hubiese sido así y el PSOE estuviese en la oposición en el Palacio Provincial, no habría esa consolidación de liderazgo y no hubiese obtenido esa mayoría aplastante en las primarias de 2017.

Y  a ella se añade su política de la suma, incorporando a la ejecutiva a sus adversarios.

Una vez finalizado un  año congresual, el PSOE gaditano tiene el reto de las municipales de 2019 y el proceso de primaria para elegir a los candidatos. Quien pone la fecha de las primarias es la comisión ejecutiva federal. En estos momentos no se sabe cuándo se celebrarán. La única certeza es que las elecciones municipales se celebrarán el tercer domingo de 2019, porque así está marcado por ley. Queda por tanto año y medio. La intención del aparato socialista es tener a los candidatos cuanto antes, pero sin prisas y cumpliendo los trámites que estipulan los estatutos del partido.

En los próximos meses sí se irán fijando posiciones que el panorama de los que quieren ser candidatos. En el PSOE y dado que no hay una limitación de mandatos, los alcaldes que han ganado las anteriores elecciones deben repetir como cabeza de listas. Así  Mamen Sánchez Díaz volverá a presentarse para luchar por mantenerse como alcaldesa de Jerez.

Otra cuestión es el caso de Cádiz, donde el candidato socialista en 2015 y recién elegido secretario general del partido en la ciudad, Fran González, no logró buenos resultados. Obtuvo cinco concejales,(dos menos que en la cita de 2011) y quedó el PSOE quedó como tercera fuerza política en la ciudad. González además no ha consolidado su liderazgo social por lo que no es seguro que vuelva a repetir como candidato.

En la tercera gran ciudad de la ciudad, Algeciras, la agrupación socialista ha vivido en los dos últimos años un proceso de renovación que ha llevado a Juan Lozano a liderar el partido tras muchos años que estaba en poder de los pizarristas. Lozano ha sumado a su proyecto a una parte de sus adversario y ha consolidado su proyecto, obteniendo en 2017 un mayor respaldo de la militancia que hace un año. En principio es el gran favorito para ser el candidato de su partido para las municipales de 2019. El anterior cabeza de lista, Fernando Silva, no obtuvo grandes resultados.

 

“Tenemos un PSOE más fuerte en la provincia”

Irene García ha asegurado esta semana que el PSOE de Cádiz ha vivido un intenso proceso de renovación de sus estructuras “del que nos sentimos orgullosos por el ejercicio de democracia interna y alta participación de la militancia, lo que sin duda ha servido para que tengamos un PSOE de Cádiz más fuerte para seguir trabajando por nuestro proyecto en la provincia, desde todas las agrupaciones”.

La secretaria general expresó dos deseos para la provincia de cara al próximo año. Habló de “una mayor cooperación interinstitucional, que todas las administraciones fuésemos de la mano para encarrilar el futuro de esta provincia, esto está en la mano de los partidos políticos, en la voluntad de quienes los dirigen”.

“La segunda cuestión que pediría es que el Gobierno permitiera a los ayuntamientos con superávit poder invertir en la mejora de los servicios públicos”,  manifestó la dirigente socialista. 

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