La inspección de Comercio ha realizado 54 actuaciones informativas e inspectoras en las rebajas de invierno en la provincia de Almería, lo que ha derivado en la apertura de siete expedientes por posibles faltas en los comercios.
Así, dos expedientes se han abierto por faltas graves --con multas de hasta 45.000 euros-- al no atender el requerimiento efectuado o porque los artículos seleccionados tenían menos de un mes de antigüedad en el establecimiento, y una leve por no informar sobre el periodo de las rebajas, lo que puede acarrear una sanción de 300 a 3.000 euros. El resto de expedientes están a la espera de recibir documentación para su valoración.
A través de la actividad desarrollada en los primeros meses del año, el Servicio de Comercio de la Delegación de Empleo, Formación, Trabajo Autónomo, Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad ha visitado diferentes empresas con el fin de informar acerca de la normativa y sus obligaciones y de comprobar su cumplimiento en lo relativo a las rebajas.
Según explica la Junta en una nota, se han realizado 24 visitas informativas a comercios de la capital almeriense, El Ejido y Albox, en las que los técnicos de la inspección comercial han dado a conocer entre los comerciantes la normativa acerca de las rebajas, entregándoles folletos informativos y tomando referencias de varios artículos y sus precios.
Posteriormente, se han cursado 30 visitas inspectoras a establecimientos comerciales de estos municipios en las que los técnicos han verificado, entre otros aspectos, que los productos rebajados fueran los mismos que estaban a la venta un mes antes del inicio de las rebajas, así como que realmente se haya producido una disminución en el precio de venta al público.
También se ha observado si los artículos vendidos como rebajados estaban en buen estado y que en el comercio hubiera existencias suficientes con los descuentos que se anunciaban a modo genérico.
De manera complementaria, se han revisado aspectos como la existencia de libro de hojas de quejas y reclamaciones y su cartel anunciador, la actualización de la inscripción en el Registro de Comercio o que los precios estén visibles en los artículos, incluidos los escaparates.
La finalidad de estas actuaciones de inspección es garantizar la lealtad en la competencia y los derechos de los consumidores, a la vez que se realiza una labor de información y divulgación sobre la normativa reguladora de este tipo de ventas promocionales. De este modo, se pretende garantizar el desempeño óptimo de la actividad comercial, lo que repercute directamente en beneficio tanto de las personas comerciantes como de las consumidoras.
Esta campaña se enmarca en el Plan de Inspección Comercial 2020, aprobado en el seno del grupo de trabajo conformado por la Dirección General de Comercio y agentes sociales y económicos del sector, y en el que se incorpora como novedad el control específico al comercio electrónico con la realización de campañas que tendrán como objetivo garantizar la seguridad de las compras y evitar fraudes e incumplimientos legales por parte de los comerciantes.
Estas acciones de control a la venta online se llevarán a cabo a partir del segundo semestre de 2020, coincidiendo con la celebración del 'Black Friday' o con el período de rebajas; y se centrarán en el análisis de las páginas web por provincias y productos.