El técnico del Granada, Diego Martínez, dijo en vísperas de la visita al Villamarín que saben que "el Betis va a estar herido", tras perder el jueves ante el Sevilla (2-0), y pondrá "toda la carne en el asador para hacer un partido muy duro y difícil", aunque su equipo tirará de "personalidad" para "ir al máximo".
Martínez indicó este domingo en una rueda de prensa telemática que, por su pasado sevillista, conoce "bien" la ciudad" y que "los derbis son partidos especiales y después parece que hay paréntesis", recordando que "antes del parón el Betis estaba en buena dinámica".
Advirtió, además, del gran potencial del equipo verdiblanco, al resaltar que "uno analiza la plantilla del Betis, con Fekir, Canales, Borja Iglesias, Aleñá, Joaquín...., y cuenta con un gran equipo con un buen entrenador".
"Nosotros con nuestra personalidad vamos ir a nuestro máximo, que es lo que queremos", subrayo el entrenador gallego, a quien le gustaría jugar en "un Villamarín lleno, con muchos granadinistas en la grada" ante un rival "con bastantes jugadores desequilibrantes", por lo que calificó el choque como "un reto" para el Granada.
Explicó que esperará "hasta el último momento" para ver si puede contar con algunos de sus futbolistas que tiene tocados y que esto va a ser la "tónica general" en lo que queda de campeonato.
"Preparar estos diez partidos no sólo va a tener que ver con el plan de partido ideal o con lo que te gustaría hacer, sino que en la coctelera hay que incluir la disponibilidad, las sensaciones y los momentos de recuperación de los jugadores", agregó.
Para Diego Martínez, "más que una liga de diez partidos vamos a jugar diez ligas de un partido, y cada una con un guión y características distintas, por lo que toca reinventarse cada día, en cada entrenamiento y en cada partido, que es lo que llevamos haciendo toda la temporada", aseveró.
Sobre las numerosas bajas en su equipo, dijo que tiene "la certeza" de que "el que salga se lo merece y va a competir", y valoró como "muy buena noticia" la recuperación de Antonio Puertas tras cumplir una sanción, además de que "las incorporaciones desde el banquillo van a ser claves y determinantes".
"Los cinco cambios te permiten dar solución a unos últimos minutos en los que siempre hay algún jugador con calambres o fatiga, y los usamos para cambiar cosas durante el partido y gestionarlos de la mejor manera posible", indicó.
Tras completarse casi al completo la primera jornada tras el parón por el coronavirus, Martínez tiene claro que "no se puede analizar a los equipos igual que antes" porque es diferente "el soporte físico y mental, además del estado físico y de confianza".
El técnico, que cumple este domingo dos años en el banquillo del Granada, manifestó que de este periodo se queda con "la felicidad del día a día y la identificación con un grupo de jugadores que hace que ese día a día sea muy especial".
"Estoy orgulloso de lo que representamos y transmitimos en el campo. La palabra es felicidad, porque es difícil sentir eso en el día a día y durante dos años. Y a eso se le añade el momento único que vivimos como equipo, con 41 puntos, con los valores que transmite el equipo y las ganas de mejorar que hay", afirmó.