El concejal de Ciudadanos, Ángel Montoro, ha expuesto en un comunicado, en relación con el anuncio de su destitución y la de la concejal de su grupo, Paloma Moyano, que “se trata de una venganza personal del señor Peñalver por haber denunciado toda la trama de irregularidades relacionadas con el convenio urbanístico que se suscribió con su madre y otros familiares en los terrenos que afectan a Consolación”.
“Desde la parte naranja del gobierno ya se le expresó en repetidas ocasiones, la necesidad de transparencia, cautela y responsabilidad frente a esta cuestión. Entendían incomprensible cómo en un asunto que afecta directamente a la madre del alcalde y familiares no se actuaba con la mayor transparencia posible en consonancia con lo que él hacía/pedía cuando estaba en la oposición”.
En palabras del concejal “siempre hemos puesto de manifiesto que no entendíamos que se saltara la firma del concejal de Hacienda y Contratación para firmar una incorporación de remanentes de más de 160.000 para dotar la partida que afectaba a los terrenos de su madre y familiares, siendo este un tema en el que al afectar a sus familiares directos debe mantenerse completamente al margen. Del mismo modo denunciamos que el único pliego que este concejal de Contratación no firmó fue por orden directa del señor Peñalver para que se pusiera directamente a su firma, y pudiera el mismo darle rapidez y celeridad a sus intereses”.
En el comunicado remitido se asegura que “ambos concejales aún no han recibido su cese pero si adelantan como concejales aun de este Gobierno que su compañero Javier Pérez, presentará su dimisión como coordinador de aldeas en los próximos días”.
Finalizan exponiendo que “entienden el miedo del alcalde, ya que el mismo sabe que no ha hecho las cosas bien”, exponiendo, por último que “si tienen que salir del Gobierno para defender la transparencia y la imagen de nuestro municipio no les duele, y que a los concejales no les cabe duda que volverán en unos meses”.
