A.B.S., el hombre de 32 años acusado de asesinar a una mujer en su vivienda de Roquetas de Mar durante la madrugada del 8 de enero de 2023 tras haber mantenido relaciones sexuales "consentidas" con ella, ha reconocido ante un tribunal de jurado que estranguló a la mujer con sus manos aunque cuando lo hizo, supuestamente bajo los efectos de alcohol y las drogas, según su versión, no tenía la "intención" de matarla.
Así lo ha manifestado durante su declaración en la vista oral que ha arrancado este lunes en la que la Fiscalía solicita para él 18 años de prisión como presunto autor del feminicidio al entender que se habría servido de su superioridad sobre la mujer y el crimen se habría ejecutado con premeditación, conforme a su escrito provisional de acusación, si bien la defensa ejercida por el letrado Juan Carlos Vélez ha pedido la absolución del acusado o, como alternativa, una condena por homicidio.
Si bien la Fiscalía ha sostenido que para llevar a cabo los hechos el acusado previamente habría cerrado "con el pestillo" la puerta del dormitorio tras mantener una discusión con la mujer, el hombre ha negado dicho extremo y ha afirmado que en ningún momento se levantó para bloquear el acceso de la habitación, aunque sí ha reconocido que hubo un desencuentro previo.
Ante el tribunal presidido por el magistrado-presidente Jesús Martínez Abad, el acusado ha señalado que el día de los hechos había cobrado unos 70 euros por un trabajo que había realizado, de modo que habría aprovechado para adquirir y tomar cocaína, marihuana y alcohol --cerveza--, entre otros estupefacientes, aunque no consta prueba pericial que avale este aspecto. Ya por la noche, de acuerdo con su versión, accedió a la vivienda invitado por la víctima, a la que conocía de ocasiones anteriores, para mantener relaciones sexuales.
El hombre, quien desconocía que en la vivienda también estaba el hijo de la víctima, ha apuntado que tras mantener relaciones iniciaron una discusión en la que, según ha dicho, él no llegó a agredir a la mujer pese a los hematomas que presentaba aunque, en un momento dado, sí que la estranguló.
Según su relato, ella habría tratado de defenderse para lo que, según sus explicaciones, llegó a propinarle un mordisco en el labio. También habría llegado a pedir auxilio, si bien él afirma que el hijo de la víctima se presentó en la habitación acompañado por la Guarida Civil cuando esta ya había fallecido.
A la vista del reconocimiento parcial de los hechos, la Fiscalía ha renunciado a buena parte de la prueba testifical, por lo que ha interesado que en las próximas sesiones solo declaren varios agentes de Guardia Civil encargados de la investigación y el médico forense que efectuó la autopsia.
Además de la pena privativa de libertad, la Fiscalía también pide para el acusado la prohibición de acudir o residir en Roquetas de Mar durante 25 años así como de aproximarse o comunicarse con el hijo de la víctima durante el mismo periodo de tiempo.
De igual modo, solicita la imposición de ocho años de libertad vigilada para el acusado y el pago al hijo de la víctima de 150.000 euros en concepto de indemnización por los daños morales. La siguiente sesión está prevista para el próximo miércoles 2 de abril a partir de las 10,00 horas.
