La Mesa del Agua de Almería ha alertado de la situación "crítica" que atraviesan el municipio de Níjar y la comarca del Almanzora, especialmente de cara a los próximos meses, durante la reunión que ha celebrado este martes en la sede de Asempal, donde se ha analizado la disponibilidad de recursos hídricos y las previsiones para lo que queda de año.
Según ha explicado en un comunicado el portavoz de la plataforma, José Antonio Fernández, "en el Almanzora seguimos sin la desaladora de Villaricos, sin agua del trasvase del Negratín, que permanece cortado, y con nuevos recortes en el del Tajo-Segura", por lo que ha señalado que, "a este ritmo, habrá miles de hectáreas que no se podrán plantar".
"Los regantes han visto cómo, un año más, no ha llegado cantidad alguna del trasvase desde el Negratín, del que se pueden obtener hasta 50 hectómetros cúbicos anuales, una cantidad muy importante que ha dejado de llegar a tierras almerienses. A ello se ha sumado la disminución de caudales procedentes del trasvase Tajo-Segura", han señalado desde la Mesa del Agua.
En la comarca de Níjar, "hay dos días de agua y dos de cortes", y la desaladora de Carboneras se encuentra "en mal estado". Fernández ha explicado que las balsas de la Comunidad de Usuarios de Níjar (CUCN) "no tienen apenas reservas y por eso no esperamos que mejore la situación".
"Lo que sí pedimos son soluciones ya, como que los 15 hectómetros cúbicos que utilizan los pueblos del Almanzora del Tajo-Segura, si las desaladoras funcionaran correctamente, pudieran destinarse a la agricultura", ha señalado el portavoz de la plataforma.
La Mesa del Agua también espera que la desaladora Mar de Alborán "pueda ponerse a funcionar al cien por cien con sus 20 hectómetros cúbicos, lo que permitiría reparar la de Carboneras y evitar que los regantes de Níjar pasen a una situación catastrófica". Por eso, Fernández ha advertido de que "esperamos una serie de problemas en otoño en ambas zonas. Y hay que recordar que el Almanzora está ya en producción".