Considerada como un paraíso fiscal, Gibraltar ha sabido posicionarse como un territorio favorable a las criptodivisas. Según el análisis realizado por un grupo de expertos del Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada, “a años luz de las restricciones de Estados Unidos, la Unión Europea e incluso China –a pesar de la exitosa prueba con el yuan digital en los pasados Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín–”, el Peñón comenzó a recorrer su camino en 2017 al introducir el primer marco regulatorio para la tecnología DLT (sobre la que se basa entre otras la cadena de bloques) a nivel mundial.
Consideran que es un hito que permitió a la colonia británica no sólo reivindicarse como pionera en la legislación de esta clase de activos, sino también en un destino solicitado para agentes de todos los sectores y empresas de todas las nacionalidades.
Desde ‘holdings’ a ‘exchanges’, pasando por plataformas de pagos, corporaciones especializadas en el comercio al contado y promotores de fondos de inversión en activos digitales. Todos se han visto seducidos por el “entorno regulatorio amigable” que ofrece el Peñón en el ámbito de las divisas virtuales. De este modo, Gibraltar se ha erigido en un referente para otros países que tienen previsto convertirse también en un hub en blockchain y finanzas, como es el caso del emirato de Dubái.
El grupo de analistas del Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada ha desglosado los motivos que han convertido a este enclave peninsular bajo soberanía británica, en un modelo a seguir en términos de regulación financiera, especialmente en el ámbito de las finanzas descentralizadas.
Desde 2017, desde su Comisión de Servicios Financieros (GFSC), el Gobierno de Gibraltar ha desarrollado y aprobado leyes, y adaptado su sistema bancario para transformar al Peñón en un centro internacional de excelencia para las empresas que trabajan con redes DLT y, más concretamente, en el ámbito de las criptomonedas.
Los analistas indican que la madurez de este nuevo ecosistema de finanzas descentralizadas (DeFi) ha atraído a infinidad de actores hasta el punto de que, según el informe Crypto Hedge Fund Report 2021 de la consultora PwC, Gibraltar ya es la principal jurisdicción europea de fondos tokenizados y la tercera del planeta, con un 9% del total. Estos fondos, debidamente regulados por la legislación local, acompañan con su experiencia y conocimiento a los inversores profesionales que deseen adentrarse en el mundo de los activos digitales.
Asimismo, el Instituto indic aque la regulación en Gibraltar permite a los hedge funds domiciliados en el Peñón emitir ofertas de tokens de seguridad (STO) vinculados al valor liquidativo de los respectivos fondos. De esta forma, estos pueden facilitar a sus inversores una exposición responsable y transparente al mercado de los criptoactivos.
“Cada STO se convierte en su traslación a blockchain con el equivalente al valor liquidativo de un fondo convencional, pero permitiendo (a diferencia de estos últimos) que el inversor se convierta en custodio de sus tokens. Acto seguido, estos STO ya están en disposición de ser utilizados como colateral en otras inversiones. Por ejemplo, en la solicitud de un préstamo contra estos ahorros en criptodivisas, una vez hayan sido depositados en un valor fiduciario”, explican.
Un caso práctico en este sentido es el ‘hedge fund’ Belobaba, fundado por socios españoles e impulsado desde la escuela de formación de blockchain y DeFI (BITBCN), que vehicula el 100% de sus inversiones en activos digitales y a través de su propio token de seguridad (KHAN), regulado precisamente por la Comisión de Servicios Financieros de Gibraltar.
Según la consultora estadounidense DealBox, el volumen mundial de comercio de estos STO crecerá hasta los 163 millones de millones (trillones americanos) de dólares en 2030, sobre una base de 4 millones de millones de dólares en tokens de seguridad emitidos en el mismo período.
Como contrapunto a la desconfianza e inmovilismo que se desprende desde los sectores financieros más tradicionales (e influyentes) de la Vieja Europa, algunas autoridades financieras de Gibraltar como la Asociación de Fondos e Inversiones (GFIA) y la Asociación de Nuevas Tecnologías (GANT) colaboran activamente en el evento CryptoFunds22, una serie de sesiones informativas que tendrán lugar en Londres (30 de marzo), Dubái (10 de mayo) y Abu Dhabi (12 de mayo).
Desde CryptoFunds22, el Ministerio de Finanzas del Peñón espera atraer a consultores de fondos familiares (family office), gestores de fondos y grandes inversores institucionales, facilitando la transición de estos gestores de patrimonios tradicionales hacia fondos en criptoactivos. A nivel interno, la comunidad global para emprendedores Startup Grind también ha agendado para el 7 de abril una sesión en Gibraltar dedicada a la Web3. En ambos casos, Belobaba ha sido seleccionada como caso de éxito para exponer su estrategia múltiple de inversión en criptoactivos, especialmente en proyectos emergentes de Blockchain Gaming y Metaverso.
INNOVACIÓN
Después de marcar el camino en el ámbito regulatorio y, a la espera de que la Comisión de Servicios Financieros apruebe la compra del 90% de la bolsa de Gibraltar por parte del holding local, Valereum, el Peñón aspira a convertirse en el primer territorio con un mercado bursátil integrado, en el que se podrán negociar acciones y productos financieros convencionales por criptodivisas.
Esta operación representaría el primer paso hacia una nueva etapa en la aceptación a nivel global de los activos digitales y en la evolución de las criptodivisas hacia las transacciones con otra clase de valores. Estas políticas contrastan con la lentitud de organismos regulatorios europeos, cuya única acción al respecto ha sido en torno a la publicidad de criptomonedas, o de las Autoridades Europeas de Supervisión bajo el paraguas de la ESA, que siguen refiriéndose a esta clase de activos como “de alto riesgo” o “especulativos”, ya que “suelen quedar fuera de la protección existente en la actual normativa de servicios financieros de la UE”.
Los fondos tokenizados con un STO regulados en Gibraltar están pensados únicamente para inversores profesionales y grandes capitales, que deben someterse a procesos de verificación de identidad (KYC) y cumplir estrictos requisitos antes de formalizar su entrada en un fondo. La rigurosidad de la legislación gibraltareña, cimentada sobre los pilares de la ley inglesa, así como la experiencia y reconocido prestigio de su sistema bancario ejercen como barrera eficiente para los especuladores que solo busquen lucrarse a costa de la inexperiencia del inversor.
Los expertos del Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada concluyen que, la cuestión es de la principal importancia por ser una realidad contingente, que requiere más estudio y difusión que estigmas, del mismo modo que algunos de los principales actores de los sistemas financieros de España y Europa comienzan a adentrarse en el ecosistema cripto a través de filiales instaladas en mercados como Brasil o Suiza, las autoridades y organismos reguladores están llamados a desencallar la definición de un marco regulatorio común y actuar con apremio para adoptar unos activos que no solo forman parte de la realidad financiera global, sino que pueden convertirse en el complemento necesario para reflotar una economía en caída libre después de una situación de pandemia global e incertidumbres que están alterando severamente los sistemas financieros.