Los sindicatos y las cajas inmersas en la fusión que dará lugar a Unicajasur dieron ayer un tímido primer paso en la negociación laboral después de que la dirección haya concretado por primera vez algunas de las medidas con las que pretende reducir costes, aunque no las cuantificaron.
Tras más de dos horas y media de reunión en la sede central de CajaSur en Córdoba, la quinta mesa laboral finalizó con un sentimiento entre los representantes de los trabajadores de cierto avance, aunque no de acercamiento de posturas, porque aunque es la primera vez que la dirección concreta medidas no la ha cuantificado.
De este modo, los sindicatos no han podido pronunciarse sobre la "madre del cordero", según definió el secretario de la Agrupación de Ahorro de la Federación Comfia de CCOO de Andalucía, José Segura, a la cuantificación de esas medidas para consolidar la fusión entre Unicaja y Cajasur.
"Respecto a la última reunión sí ha habido avance. Han concretado medidas que sólo habían dicho teóricamente, pero sin apostar por ninguna de ellas. Han establecido abanico de edades, porcentajes, pero sin definir", declaró Segura a los periodistas tras la reunión.
El sindicalista explicó que sobre la teórica reducción de costes, que se cifran en 56 millones de euros que supondrían el excedente de más de 1.200 trabajadores que apunta el informe de Boston Consulting, la dirección no se pronunció porque se limita, según dijo, a plantear una serie de medidas concretas para mejorar la eficiencia de la caja.
"Hasta que no entremos de verdad en cada una de las medidas y cómo va a ser el marco de las relaciones laborales de la futura caja, estamos en los titubeos, pero parecen que se mueven -en referencia a la dirección- un poco", declaró Segura, quien insistió, como el resto de sindicatos, en que los trabajadores no aceptarán un ERE -o cualquier otra medida traumática- que la empresa planteó ayer como posibilidad ante la falta de acuerdo, según los sindicatos.
Por su parte, el presidente de Aspromonte -sindicato mayoritario en Cajasur-, José Ignacio Torres, calificó la reunión de "moderadamente positiva" y valoró que el coordinador del proceso de concentración, Manuel Azuaga, haya dicho que el acuerdo laboral es la condición "sine qua non" para la fusión.
Además, destacó que por primera vez se haya hablado de "coste laboral" y no de "despidos" porque la dialéctica en estos asuntos es "importante", dijo.
El secretario sectorial de Ahorro de UGT-A, Andrés Oliva, indicó que el ahorro de costes no pasa exclusivamente por una rebaja de la plantilla, ya que se pueden adoptar otras medidas como ahorro del gasto corriente, por ejemplo.
De hecho, el secretario general de CSICA, Emilio Menéndez, apuntó que, si bien la empresa está "obsesionada" con que se llegue a un acuerdo laboral, los sindicatos están también obsesionados con que las medidas a aplicar sean "conjuntas".
"No podemos ir solamente al ahorro de costes porque no es lo mismo un plan general de negocio que un plan de acuerdo de fusión laboral", declaró.
El secretario general del SECAR, Sebastián Torres, indicó que "por fin" las direcciones de las cajas presentan medidas para "atajar" el informe de Boston Consulting, aunque éstas son insuficientes.
Ante esta situación, los sindicatos van a estudiar las medidas presentadas ayer por las cajas y crearán una comisión informal -previsiblemente esta semana- previa a la convocatoria de la próxima mesa de negociación que, según José Segura, podría ser a primeros de marzo.