Muchos de ellos ni siquiera lo saben, pero los alumnos “son genios en una botella” que los profesores del Departamento de Ciencias del instituto San Telmo, Manoli Navarrete, Guadalupe Lorente, Luis Labajo y Fermín Moreno están intentando descorchar hasta cuando suena la campana. Quieren captar la atención no sólo de los clásicos ‘empollones’ sino de los alumnos que están más dispersos, en muchos casos por las condiciones socio-económicas que les ha tocado vivir, con la puesta en marcha de una serie de experiencias científicas que abarcan las cuatro ramas básicas: Física, Química, Biología y Geología, y que pretenden acercar las bases de la Ciencia al alumnado de manera amena y divertida.

Sin duda, Con-ciencia en San Telmo, que es como han denominado a esta actividad que se desarrollará con una periodicidad mensual, dejó con la boca abierta a más de uno en su primera sesión que se desarrolló ayer desde las 16.30 horas ante la atenta mirada de alumnos, padres y profesores que vieron cómo una botella de plástico de 33 centilitros, escayola, malla metálica, bicarbonato sódico, jabón líquido, pimentón, vinagre y una cucharilla se transformaba en un volcán en erupción. Eso sí, este tipo de experiencias geológicas sólo hay que hacerlas bajo la supervisión de profesionales, para que realmente este fenómeno ‘natural’ no acabe en desastre.
Además, los profesores de Ciencias y sus alumnos de ESO estrenaron el material científico aportado por la Delegación Provincial de la Delegación, Administración a la que ya le solicitaban nuevos envíos para contar con una clase de Ciencias más completa.

Y es que para estos docentes es fundamental contar con un aula lo más completa posible para desarrollar esta actividad, que nace de su inquietud. “En el mundo actual, los avances científicos nos rodean por doquier, y los medios de comunicación nos bombardean casi constantemente con nuevos descubrimientos a veces asombrosos. En el instituto San Telmo, nos preocupamos por esa alfabetización científica. Por eso, hemos desarrollado una actividad para que los interesados -que ayer fueron muchos- puedan acercarse a este maravilloso mundo muchas veces ignorado que es el de la Ciencia”, aclara el Departamento.

al más puro estilo ‘csi’
Así, la tarde transcurrió con actividades que llamaron mucho la atención como fue la obtención del ADN, en el que en menos de diez minutos y con materiales muy sencillos, los presentes pudieron comprobar de una forma indolora y totalmente segura, cómo se puede realizar -gracias a la guía de los maestros- una preparación del propio ADN. Para ello, utilizaron las células que se desprenden naturalmente del interior de la boca. Los jóvenes no tuvieron que utilizar ningún instrumento ni compuesto químico que las familias no tengan en la cocina o en el botiquín de casa, convirtiéndose así en unos verdaderos ‘CSI’ (Crime Scene Investigation) por unos momentos.

También disfrutaron comprobando la presión atmosférica, visualizando nódulos fijadores de nitrógeno y llevando a cabo una experiencia que titularon El espíritu de San Telmo, que fue una espectacular reacción química que, con una botella vacía, agua oxigenada de 110 volúmenes, permanganato potásico, un pañuelito de papel, hilo y tapón, posibilitó que todos los alumnos presentes liberaran ese genio (a modo de humo blanco) que llevan guardado en su interior.