Ha tenido que saltar
el escándalo de la silicosis con una condena de por medio en Vigo que impone al responsable de la multinacional con sede en Cantoria (Almería) seis meses y tres días de cárcel por cinco delitos de lesiones graves y a hacer frente en solitario al pago de indemnizaciones por 1,1 millones de euros a los cinco trabajadores de la empresa viguesa Granitel afectados por la enfermedad para que la empresa haga
un anuncio que debería haber llevado a cabo hace ya muchos años y que se antoja insuficiente. En un movimiento para intentar aplacar los ánimos
ante su próxima salida a bolsa después tras el fallo judicial en contra y las protestas de los enfermos de silicosis, Cosentino ha anunciado este lunes que uno de los objetivos que se ha marcado para este mismo año es el de
bajar tan solo un 10%, del 50% actual hasta el 40 % el índice de sílice cristalino de todos sus productos. Así lo ha señalado en declaraciones a los medios el director de Innovación y Producto del Grupo Cosentino, Valentín Tijeras, durante la presentación en la Universidad de Almería (UAL) del proyecto ‘Free Advanced’. “Se trata de hacer un producto tan bueno como ‘Silestone’ pero de una manera más sostenible y segura para toda la cadena de suministro y de valor”, ha dicho, según declaraciones recogidas por la agencia EFE.
En una dura sentencia, el tribunal ha dejado patente que
el Silestone es mucho más peligroso que el mármol y el granito y resalta que el contenido de sílice de estos aglomerados de cuarzo es aproximadamente de un 95 %, por lo que la “manipulación, corte y pulido de dicha sustancia”,
provoca un polvo con un “elevadísimo porcentaje de sílice libre cristalina”. Incide en que estas partículas llegan a los alveolos pulmonares, y producen la conocida como “fracción respirable de polvo de sílice libre cristalina”, que se acumula y con su inhalación prolongada en el tiempo, deriva en “la enfermedad conocida como silicosis, que es un tipo de “neumoconiosis” caracterizada por producir una fibrosis pulmonar difusa “irreversiblemente progresiva, que tiene la consideración de enfermedad profesional”.
Tijeras declinó pronunciarse sobre la sentencia que condenó al presidente del Grupo Cosentino por cinco casos de silicosis en Vigo,
o por su afección a la posible salida a bolsa de la multinacional, al considerar que no es la persona adecuada para ello.