El auto dictado por el juez establece que se ejecute la sentencia dictada en abril de 2010 y fija un plazo de 10 días para pagar la indemnización a Martínez Gabaldón, que cesó en su cargo hace diez meses.
La sentencia dictada por el mismo juez en abril estima parcialmente la demanda por despido interpuesta por Martínez Gabaldón y condena a la galletera a readmitir al alto directivo o en su lugar a indemnizarle con 8,2 millones de euros mas los salarios de tramitación, que ascendían a 704.335 euros.
Además impuso a la compañía con sede en Aguilar de Campoo (Palencia), en concepto provisional de intereses de demora y costas, el pago de 1.431.066 euros, con lo que la galletera deberá hacer frente al pago de 10,3 millones de euros.
El juez ha concluido, tras la comparecencia celebrada el pasado 9 de septiembre, que no hay acuerdo entre las partes en lo que respecta a la readmisión.
El auto, conocido ayer, señala en concreto que “es evidente que ninguna de las partes tiene confianza en la otra”, e insiste en que es imposible tener la confianza que requiere una relación laboral especial de alta dirección cuando una de las partes mantiene abierta una querella por estafa.