El Quiebrajano desembalsa más agua que el año pasado
En total se han desembalsado 3,6 millones de metros cúbicos, un 5,5 por ciento más que en el pasado año.
La historia se repite. El embalse del Quiebrajano se ha quedado pequeño para las intensas precipitaciones registradas en el año hidrológico actual, que han superado en la zona los 839 litros por metro cuadrado (desde octubre). Por ello, la Agencia Andaluza del Agua se ha visto obligada a abrir de nuevo las compuertas para liberar espacio. En total se han desembalsado 3,6 millones de metros cúbicos, un 5,5 por ciento más que en el pasado año.
La justificación de este incremento en el agua desembalsada no es otra que el llenado con el que se inició el otoño, que superaba el 80 por ciento. Por ello, para evitar mayores problemas se han tenido que abrir las compuertas de forma controlada. El delegado de Medio Ambiente de la Junta, José Castro, precisa que a pesar de todo se está tratando de aliviar la menor cantidad de agua posible. “Queremos que esté lo más alto posible, respetando el resguardo de seguridad”, afirma. En estos últimos días, en los que las precipitaciones no han sido tan intensas el ritmo de desembalse ha bajado considerablemente.
Esta cifra de agua desembalsada equivale a 3,6 billones de litros de agua, lo que representa casi nueve meses de consumo en la ciudad de Jaén (el Ayuntamiento calcula que al día cada jienense gasta 117 litros). “No es mucha cantidad de agua”, recuerda Castro, quien precisa que el Quiebrajano es uno de los que menor capacidad de embalse tiene.
Mensaje de ahorro
Hoy el pantano que ‘alimenta’ de agua a la capital jienense se encuentra al 91,8 por ciento de su capacidad. Esta cantidad -en la provincia el nivel es similar- asegura el consumo, al menos, durante los próximos tres años. A pesar de estas buenas cifras, el delegado de Medio Ambiente lanza un mensaje de responsabilidad para el consumo: “El agua es un bien escaso y eso hay que recordarlo también en estos momentos”.
La justificación de este incremento en el agua desembalsada no es otra que el llenado con el que se inició el otoño, que superaba el 80 por ciento. Por ello, para evitar mayores problemas se han tenido que abrir las compuertas de forma controlada. El delegado de Medio Ambiente de la Junta, José Castro, precisa que a pesar de todo se está tratando de aliviar la menor cantidad de agua posible. “Queremos que esté lo más alto posible, respetando el resguardo de seguridad”, afirma. En estos últimos días, en los que las precipitaciones no han sido tan intensas el ritmo de desembalse ha bajado considerablemente.
Esta cifra de agua desembalsada equivale a 3,6 billones de litros de agua, lo que representa casi nueve meses de consumo en la ciudad de Jaén (el Ayuntamiento calcula que al día cada jienense gasta 117 litros). “No es mucha cantidad de agua”, recuerda Castro, quien precisa que el Quiebrajano es uno de los que menor capacidad de embalse tiene.
Mensaje de ahorro
Hoy el pantano que ‘alimenta’ de agua a la capital jienense se encuentra al 91,8 por ciento de su capacidad. Esta cantidad -en la provincia el nivel es similar- asegura el consumo, al menos, durante los próximos tres años. A pesar de estas buenas cifras, el delegado de Medio Ambiente lanza un mensaje de responsabilidad para el consumo: “El agua es un bien escaso y eso hay que recordarlo también en estos momentos”.
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