Las
lluvias torrenciales del pasado octubre dejaron un
rastro de destrucción en España. Más de 200 personas perdieron la vida, cientos de municipios quedaron devastados, y miles de hogares sucumbieron ante la fuerza implacable de la naturaleza.
La catástrofe, que azotó especialmente a la
Comunidad Valenciana y Andalucía, recuerda la urgencia de
estar preparados para los embates del
cambio climático. Sin embargo, la tragedia ha derivado en un
tenso debate político y burocrático, mientras se espera que los fondos europeos alivien la situación.
El contexto de los fondos europeos
España, en medio del caos,
recurrió a mecanismos de emergencia como el programa de satélites
Copernicus y el Mecanismo de
Protección Civil, con apoyo de países como Francia y Portugal.
Sin embargo, la solicitud del
Fondo Europeo de Solidaridad, el recurso principal para afrontar este tipo de desastres, no se realizó
hasta el último minuto antes de expirar el plazo. El retraso ha generado
duras críticas en el Parlamento Europeo.
Posturas enfrentadas en el Parlamento Europeo
El pasado martes, la
Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo abordó la gestión de estas ayudas, dejando al descubierto
profundas divisiones entre los eurodiputados:
Rosa Estarás, eurodiputada del Partido Popular, afirma que “solicitar el Fondo de Solidaridad al
último minuto es inaceptable. Vamos a ser
muy vigilantes para garantizar que los fondos lleguen a tiempo a los afectados”.
Sandra Gómez, eurodiputada del PSOE, propone una
mayor atención ante los avisos. "El presidente valenciano estuvo
ilocalizable en las primeras horas. Proponemos
estándares europeos más altos para
evitar estos retrasos".
Jorge Buxadé, eurodiputado de Vox, critica la actuación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico: "la v
erdadera causa de la tragedia fue la apertura masiva de
presas. Apoyamos la
visita a las zonas afectadas, pero solo para hablar con los
vecinos, n
o con las instituciones responsables".
Vicent Marzà, eurodiputado de Compromís, enfrenta la acción de los partidos ante la Dana: “es una vergüenza cómo los partidos
politizan una tragedia humana. La prioridad debe ser a
gilizar los fondos y buscar soluciones para
prevenir futuras catástrofes”.
Andalucía, la otra cara de la tragedia
En
Andalucía, la DANA de octubre dejó
casi 300 municipios afectados, con un total de 2.841 incidentes registrados. Localidades como Cártama y Álora, en Málaga; Jerez, en Cádiz; y varios municipios de Granada sufrieron graves daños. A pesar de que
185 municipios andaluces han recibido ayudas europeas, localidades como Almogía, en Málaga, todavía sufren los efectos de la catástrofe.
Las
ayudas del Fondo Europeo de Solidaridad son fundamentales para
reconstruir infraestructuras y brindar apoyo a los
damnificados, pero el proceso está siendo
lento e insuficiente en algunas áreas.
Un futuro por construir
El debate en el Parlamento Europeo pone de manifiesto la
urgente necesidad de mejorar la coordinación entre administraciones.
Más allá de las diferencias políticas,
garantizar una respuesta rápida y efectiva no sólo es esencial para los damnificados, sino también para prevenir que tragedias similares golpeen con tanta fuerza en el futuro.