La concejala de Deportes, Beatriz López, acompañada por el director técnico de Sugar Ray Promotions y la presidenta del Proyecto Semilla, María Isabel García, ha presentado la sexta edición de la gran velada solidaria White Collar Boxing, que se celebrará este sábado 22 de febrero en el salón La Estrella del Hotel HO “Ciudad de Jaén” a beneficio del citado colectivo, cuyo objetivo es brindar una atención integral mujeres embarazadas o con hijos de 0 a 3 años que se encuentran en una situación social y económica desfavorable Sugar Ray Promotions, el Patronato Municipal de Deportes, la Federación Internacional World Boxing League, Fightland España y el citado establecimiento hotelero son los organizadores de una velada no competitiva que contempla la celebración de 16 combates entre aficionados que practican su deporte favorito en el Sugar Ray Jaén y contrincantes procedentes de Madrid, Granada o Canarias. Serán de tres asaltos de dos minutos de duración y con unos guantes más acolchados que los que se usan en el boxeo amateur.
López se ha congratulado de que “el deporte, de nuevo, se ponga al servicio de la solidaridad” y ha mostrado su convicción de que “la cita ya es un éxito desde antes, incluso, de su celebración, porque la respuesta de la ciudadanía, un año más, está siendo excelente y quedan ya apenas cien entradas disponibles”. “Pese a que hablamos de una disciplina considerada, a priori, minoritaria, el boxeo es uno de los deportes que más tirón tiene en la capital y en la provincia, como se demuestra en todas y cada una de las actividades que viene promoviando Sugar Ray Promotions desde hace años”, ha añadido. Buendía, por su parte, ha destacado que “desde nuestra promotora no solo trabajamos en la promoción de los deportistas de contacto de la capital, también en proyectos de carácter solidario como este, que se ha convertido ya en un clásico no solo en nuestra ciudad, sino en todo el territorio nacional”. García, mientras, ha agradecido a Sugar Ray Promotions y al Ayuntamiento “por haberse fijado en un proyecto que lleva apenas cuatro años funcionando” y por “la ayuda que nos están prestando para poder seguir adelante y dar sustento a todas esas mujeres que llegan a nuestra casa de acogida en una gran situación de vulnerabilidad física o psicológica y que luego están con nosotros el tiempo necesario para salir del recurso con una vida digna”.
Horarios
La cita comenzará a las 18:00 horas con las actuación de DJ Bigotes y, posteriormente, de Divas, un proyecto musical de tres mujeres de Jaén capital y Linares que surge con el objetivo de versionar a las grandes voces femeninas del soul, blues, rithm and blues o el funk. Servirá para para dar la bienvenida a los espectadores y para crear ambiente antes del primer combate, previsto para las 8 de la tarde. Un año más, la respuesta de los jiennenses está siendo excelente, por lo que quedan muy pocas entradas disponibles. Los más rezagados aún pueden conseguirlas en el Sugar Ray Jaén, ubicado en el Camino de las Cruces número 3, en horario, de lunes a viernes, de 8:00 a 13:00 horas y de 17:30 a 22:00 horas, y los sábados, de 8:00 a 13:00 horas. El precio es de 16 euros. En esta ocasión, la madrina de la velada será Miriam Gutiérrez, un icono de este deporte que fue campeona del mundo del peso ligero y que fue integrante del equipo nacional de boxeo. Además, es un referente en la lucha contra la violencia de género.
White Collar Boxing significa literalmente “boxeo de cuello blanco”, que es como el mundo anglosajón identifica a profesiones que normalmente se llevan a cabo con traje, siendo también conocida esta modalidad como “boxeo para ejecutivos”. La historia de este deporte se remonta a finales de los 80 en la ciudad de Nueva York, cuando varios financieros y abogados de Wall Street decidieron entrenar como boxeadores profesionales en el mítico gimnasio Gleason’s de Brooklyn. La primera pelea organizada fue entre el abogado Richard Novak y el doctor en literatura inglesa David Lawrence, quienes, delante de un nutrido público formado por compañeros de trabajo, familiares y amigos, se enfrentaron en un combate para después irse a cenar todos juntos. Al poco tiempo eran decenas los ejecutivos que querían experimentar la sensación de sustituir la corbata de las mañanas por los guantes de boxeo por la noche. Lo que empezó siendo una actividad para ponerse en forma, perder peso y eliminar estrés, se reveló como un extraordinario sistema de entrenamiento que, además, reducía la tensión y agresividad, canalizaba el exceso de competitividad e incrementaba de forma radical la capacidad de reacción, la confianza y concentración..