La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha recordado este miércoles el primer aniversario del gravísimo accidente de tráfico acontecido al arrollar un camión articulado un control de drogas que había instalado la Guardia Civil en el punto kilométrico 24 del sentido Sevilla de la autovía AP-4, en el término municipal de Los Palacios y Villafranca; un siniestro saldado sobre todo con la muerte de seis personas entre las que figuraban dos agentes del Instituto Armado; así como cinco heridos, todos ellos miembros de la Guardia Civil.
El secretario de Comunicación y Relaciones Institucionales de UGT Sevilla, Álvaro Gilabert, ha manifestado en declaraciones a Europa Presss el "recuerdo" de la organización para con los agentes fallecidos, sus familiares y allegados. "Seguimos a su lado, seguimos trabajando por y para ellos, pidiendo más medios personales y materiales, entre otras cosas para que no pase" de nuevo una catástrofe similar a la de este trágico accidente, ha manifestado este portavoz de la AUGC.
El accidente ocurría sobre las 4,40 horas de la madrugada del pasado 19 de marzo de 2024 en el kilómetro 24 del sentido Sevilla de la autovía AP-4, en Los Palacios, donde el Grupo de Acción Rápida (GAR) de la Guardia Civil había instalado un control de interceptación de traslados de sustancias estupefacientes, conformado por un total de 17 agentes, el doble del mínimo de ocho efectivos que marca el protocolo del Instituto Armado para este tipo de dispositivos.
Aunque el control estaba en un punto "de visibilidad" de la autovía y estaba debidamente señalizado, según el subdelegado del Gobierno central en Sevilla, Francisco Toscano Rodero, fue "barrido" según sus palabras por un camión articulado cargado de productos hortifrutícolas que había partido de La Línea de la Concepción (Cádiz) con destino a Guarromán (Jaén).
Una posible "somnolencia" del camionero
Mientras el comandante de la Guardia Civil Rafael Jiménez Onetti explicaba a los medios de comunicación en el lugar del siniestro que se indagaría la posibilidad de "una somnolencia o una falta de atención" del camionero como posibles causas del siniestro, el subdelegado del Gobierno central reiteraba que se trata de un "siniestro vial por causas accidentales", aludiendo a "una distracción, un destello o un despiste" del conductor del camión, que antes de la colisión sólo dio "un frenazo o volantazo" dirigiendo el vehículo hacia el arcén, pero sin evitar que el mismo impactase contra tres coches patrulla del GAR y dos turismos particulares.
El camionero afrontaba de cualquier manera seis presuntos delitos de homicidio por imprudencia y tres supuestos delitos más de lesiones graves por imprudencia, siendo detenido y pasando tres días en prisión provisional.
Como consecuencia del accidente, fallecieron en cualquier caso dos agentes del Grupo de Acción Rápida (GAR) de la Guardia Civil y cuatro personas más que habrían estado en los vehículos particulares detenidos con motivo del control.
Entre estos cuatro fallecidos figuraban dos personas con antecedentes por delitos contra la salud pública, en concreto un vecino de Dos Hermanas (Sevilla) de 47 años de edad y un ciudadano de Ceuta de 53 años.
Los clanes de "Los Mellis" y el "Tapi"
A tal efectos, fuentes del caso consultadas por Europa Press precisaban que el citado vecino de Dos Hermanas sería una de las personas detenidas en 2018 en las operaciones denominadas Minimus, Temple y Thuran, saldadas con el desmantelamiento de un entramado criminal especializado en el tráfico de heroína en las provincias de Málaga y Sevilla. Aquellas actuaciones policiales se centraron en un clan apodado "Los Mellis" y dedicado al tráfico de sustancias estupefacientes en la capital sevillana, mayormente heroína, de la que se abastecerían en la provincia de Málaga.
En el caso del vecino de Ceuta, se trataría de uno de los 46 detenidos de la operación Asgard en 2021, saldada con el desmantelamiento de una organización dedicada al tráfico de drogas, pertenencia a organización criminal y blanqueo de capitales liderada por un individuo apodado "El Tapi". En aquella operación, desarrollada en las provincias de Cádiz, Málaga, Almería, Murcia, Barcelona y en la ciudad de Ceuta; fueron inca