Reto deportivo a la vista para Esteban Perea. El piloto de Bailén encara un fin de semana de emociones con su participación en la XII Edición de la Subida a los Montes de Málaga, un clásico de las pruebas de montaña.
“Seguimos trabajando en el apartado de suspensiones y los diferentes reglajes que este sistema ofrece para encontrar la mejor puesta a punto y exprimir todo el potencian del Silver Car S3 tiene", expresa el deportista, quien espera una subida "muy exigente".
En efecto, el piloto y su equipo ponen empeño en la puesta a punto y los reglajes de suspensión que, por complejidad y posibilidades, necesitan un esquema de funcionamiento que mejor el paso curva a curva.
El jiennense opta al podio y está convencido de que luchará por la victoria. En la Subida al Colmenar le aguardan seis mangas y 25 kilómetros, cuatro por cada una. "Sé que hará calor y dificultará el desarrollo de la prueba, pero vamos a intentar conseguir la victoria en monoplazas", expresa con vistas al compromiso en tierras malagueñas.
Lanjarón, siguiente destino
Perea ya trabaja para recopilar el mayor número posible de datos a fin de estar apunto para la Subida a Lanjarón, que se celebrará en julio, y que es otra de las citas clásicas que más ilusionan al de Bailén.