Des ACUERDO Unión Europea Gibraltar Gran Bretaña

Publicado: 11/06/2025
Autor

Rafael Fenoy

Rafael Fenoy se define entrado en años, aunque, a pesar de ello, no deja de estar sorprendido cada día

Última Columna

En este blog se pretende compartir análisis, reflexión y algo de conocimiento contigo persona lectora

VISITAR BLOG
A ver si al final se ponen en la mesa los contenciosos históricos de una situación colonial anacrónica en estos tiempos
¡Que viene el lobo! Una y otra vez repetido por el pastorcito cosechador de habas, llegó a cansar al vecindario que cada vez que oían el grito corrían a socorrer a la malintencionada criatura.  ¿Hay o no hay acuerdo?  No se sabe ya que hay, a estas alturas,  quienes se preguntan por el color de los uniformes de la policía FRONTEX, que tendrían que velar por las dos fronteras Schengen que se instalarían a la llegada de vuelos y embarcaciones.  Y eso que del Istmo no se habla. Porque si hay que poner alguna pega más, además de eso de las “aguas jurisdiccionales”, es evidente que todo lo que está en el Istmo pertenece a España y está bajo su soberanía. Incluido el flamante aeropuerto.

Esta ocasión es única para España.  En primer lugar hay que dejar meridianamente claro el tratado de Utrecht de 1714. Y en ese tratadoEl Rey Católico, por si y por sus herederos y sucesores, cede por este Tratado a la Corona de la Gran Bretaña la plena y entera propiedad de la ciudad y castillo de Gibraltar, juntamente con su puerto, defensas y fortaleza que le pertenecen, dando la dicha propiedad absolutamente para que la tenga y goce con entero derecho y para siempre, sin excepción ni impedimento alguno.”

Más allá de la fortaleza, la muralla árabe, todo el territorio del istmo peninsular no es cedido y se encuentra dentro de la soberanía española.  Si desde principios del siglo XIX Gran Bretaña ha usufructuado el territorio comprendido entre la muralla mencionada y la actual verja, es evidente que el nuevo tratado debe dejar bien a las claras que ese istmo es territorio español, dentro de la Unión Europea con todas las consecuencias. La relación de la corona de la Gran Bretaña con respecto al istmo está claramente definida en Utrecht, cuando “la dicha propiedad se ceda a la Gran Bretaña sin jurisdicción alguna territorial y sin comunicación alguna abierta con el país circunvecino por parte de tierra

El tema de las aguas como ha planteado el gobierno gibraltareño podrá ser resuelto en una corte internacional. Mientras eso se resuelve el tratado de Utrecht es taxativo, por más que algún catedrático de derecho internacional interprete que a cada territorio le corresponde las aguas que lo circundan.

Y mientras los protagonistas de estas larguiiiiisimasss negociaciones parecen felicitarse y las campanas tocan a glorioso acuerdo, el pastorcito sigue gritando ¡que viene el lobo! Parece que hay en Gibraltar quien desea fervientemente dejar las cosas como están, aunque no podrán estar de esta forma mucho más tiempo. Los deseos de algunas personas yanitas es poder disfrutar de lo mejor de los “dos mundos”. Ventajas por estar bajo soberanía Británica y aunque la madre “patria” se fue de la Unión Europea, seguir manteniendo el estatus Schengen, como si el Brexit no hubiera ocurrido.

El vecindario parece cansado de las travesuras del pastorcito y nadie le echa cuenta. ¿Acabaran las coronas del tratado hasta el moño de tanto incordio?

Por otro lado no parece que a España le importe mucho llegar a ningún acuerdo. La madre España ha estado ausente siglos de los asuntos gibraltareños y desde el último gran sitio de Carlos III, nada ha perturbado el discurrir de la base naval más importante de Reino Unido en el Mediterráneo.  La otra parte del análisis debería considerar que la OTAN, no pasa por su mejor momento y hay quienes sostienen que tiene los días contados si el amigo americano Trump sigue por la senda de incordiar a propios y extraños. Estados Unidos en los últimos tiempos parece interesarse más por la fachada atlántica de Marruecos, que por el Mediterráneo. La Unión Europea, de mayoritaria presencia en la OTAN, con dos potencias nucleares en su seno -Francia y Gran Bretaña-, no goza de la consideración debida por el fanático Trump, reedición grotesca del presidente Monroe, por aquello de América para los americanos.

El futuro de la base militar no parece estar en juego sin embargo las alianzas que se establezcan entre Gran Bretaña y la Unión Europea, descolgándose  EEUU pueden redefinir su papel geoestratégico. Las ciudades autónomas de España en el continente africano también podrían jugar un papel en este sentido.

Ante tanta traba para cerrar un acuerdo que todos anuncian, menos uno, que será de “prosperidad compartida”, bien podría España introducir aquello que por buena disposición al acuerdo viene evitando plantear. Parecería justo el recibir de Gran Bretaña un sustancial alquiler a cambio del usufructo (sin soberanía) del Istmo.  Un siglo y cuarto de alquiler de los 1,6 km² del istmo bien merece hacer alguna cuenta:  En la Línea de la Concepción, ya que es suelo linense desde 1870, el precio medio del metro cuadrado de alquiler ronda los 10 euros mes. 1,6 Km cuadrados, suponen 1 millón, 600 mil metros cuadrados. Por lo que cada mes debería recibir la Línea de Gibraltar 16.000.000 euros mensuales. Barato no, ¡Tirao!  Y en un año esto supondría 192.000.000 euros. Si se multiplica por 125 años podría cifrarse en 2.000 millones de euros, - 1702 millones 710.000 libras al cambio oficial- por el alquiler lo que debería Gran Bretaña a la Línea de la Concepción. Y a partir de este año, actualizar y contratar el alquiler del Istmo con fecha de caducidad y amén.  Si alguien se sorprende baste enunciar que el poderoso Estados Unidos paga alquiler a Cuba por la Base militar de Guantánamo, entre otras curiosidades.

¡Palos en la rueda del acuerdo! ¡Que viene el lobo! A ver si se ponen en la mesa los contenciosos históricos de una situación colonial anacrónica en estos tiempos y se habla con claridad de un territorio autónomo de la Unión en la Bahía del Estrecho, para resolver de manera razonable los contenciosos de toda la zona.

 

 

© Copyright 2025 Andalucía Información