El Kremlin ha afirmado este jueves que una intervención directa de Estados Unidos en el conflicto entre Israel e Irán supondría "una terrible espiral de escalada", después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, afirmara que sopesa la posibilidad y agregara que por ahora no ha tomado una decisión al respecto.
El portavoz de la Presidencia rusa, Dimitri Peskov, ha señalado que esta participación de Washington supondría "una expansión de la geografía del conflicto", según ha informado la agencia rusa de noticias TASS. "Escuchamos afirmaciones desde Teherán y consideramos que sería una terrible espiral de escalada", ha dicho.
Asimismo, ha destacado que el apoyo de Moscú a Teherán "es evidente", si bien ha recordado que el acuerdo sobre asociación estratégica firmado este año por ambos países no contempla un apoyo militar a Irán, algo que, según Peskov, las autoridades iraníes no han reclamado por ahora a Rusia.
El portavoz del Kremlin ha destacado además que el presidente ruso, Vladimir Putin, "tiene un gran potencial para llevar a cabo algún tipo de servicio de mediación" en el conflicto. "Mantenemos relaciones de asociación con Irán y tenemos relaciones de confianza con Israel", ha explicado.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó el martes que Washington sabe dónde se encuentra el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, si bien resaltó que Washington no va a "eliminarlo por ahora". "Es un blanco fácil, pero está a salvo", dijo el magnate.
En este sentido, avisó de que su paciencia "se está agotando" y reclamó que Teherán "se rinda de forma incondicional", ante las especulaciones sobre una posible implicación directa del país en la guerra, algo que sigue en el aire. "Puede que lo haga o puede que no. Nadie sabe qué voy a hacer", manifestó el miércoles.
Israel inició el 13 de junio una oleada de ataques contra instalaciones nucleares iraníes y zonas residenciales de la capital, Teherán. Las autoridades del país centroasiático han elevado el balance de víctimas desde entonces en más de 224 fallecidos y miles de heridos. Mientras, en Israel han muerto al menos 24 personas en ataques iraníes en represalia.